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Darksiders II


EL GUARDIÁN DE LOS SECRETOS

Comienza tomando contacto con Muerte, el protagonista de esta historia. El primer tramo del juego servirá para familiarizarte con los controles del personaje. Empieza galopando con tu caballo hasta llegar hasta el muro. Acércate y salta pegado a la pared para escalar hasta la parte alta de la pared.

Avanza y te encontrarás los tres primeros enemigos. En pantalla se mostrarán las instrucciones de combate. Pulsa el botón para golpear, y busca el momento adecuado para ejecutar mejores combos. Puedes encadenar 5 golpes rápidos, o hacer una pausa entre ellos para realizar 3 más potentes.

Continua siguiendo la estela del cuervo, tu inseparable amigo te marcará en todo momento el camino que debes seguir. Cuando pases la puerta de hielo, salta contra la pared para cruzar el foso. Tiene que mantener la dirección marcada con el joystick al mismo tiempo que te agarras. Si te caes no pasa nada porque no hay ningún peligro en el suelo.

No obstante, conviene que perfecciones esta técnica para no tener ninguna sorpresa desagradable en el futuro. Salta de nuevo contra la pared y escalar por los salientes hasta la cima. Si golpeas los bloques de hielo que hay en las paredes, aparecerán enemigos. Es opcional liberarlos para pelear o dejarlos congelados, sin embargo, los puntos de experiencia vienen genial al principio.

Cuando llegues a una zona con grandes pilares en el techo, salta contra ellos para que Muerte se quede colgado y así poder pasar de una a otra. Gira hasta que puedas dar el siguiente salto, y aprieta el gatillo para apuntar correctamente. Sigue avanzando hasta encontrar un muro rugoso por el que puedes escalar.

De momento no hay alternativas en el camino, así que no tendrás ninguna dificultad. Cuando llegues al segundo muro, trepa y salta para agarrarte al saliente que hay un poco más arriba. Ahora utiliza la pared para avanzar hacia la izquierda y enfrentarte a tu primer enemigo real.

Si eres hábil esquivando, lo tendrás bastante fácil para vencerle, ya que nuestro temido adversario es tan grande como lento. Usa los combos que has ido entrenando hasta el momento y acaba con él. Sigue por la puerta y supera el siguiente foso aprovechando el apoyo que tienes en la pared de la izquierda.

Gira la manivela y la plataforma sobre la que estás situado comenzará a elevarse. Escala por la pared de la izquierda y sigue hasta que encuentres dos muros en paralelo. Escala y cuando te quedes sin movimiento, salta al otro lado para poder seguir. Ve de una a otra hasta que llegues a la cima.

Usa la pared de la izquierda para llegar a un muro con enredadera y sigue el camino marcado. Las plataformas que te encontrarás de aquí en adelante ya las hemos explicado a fondo, y puesto que no hay caminos secundarios, limítate a observar con atención tu entorno y destruir todo bicho viviente que te encuentres por ahí.

Al final del prólogo tendrás un enfrentamiento contra Guerra. Es un enemigo mucho más duro que el anterior. Con unos cuantos golpes poderosos, podría hacerte bajar gran parte de la barra de vida. Derrótalo y observa la secuencia que cierra el prólogo y da la bienvenida al auténtico juego.

EL FUEGO DE LA MONTAÑA

Habla con Alya

Tras hablar con el Hacedor, coge el cofre que tienes a tu izquierda y sigue por el camino principal. El lugar sagrado en el que estás recibe el nombre de Tripetra. Primero te encontrarás un campo de entrenamiento a la derecha. Consulta el mapa para descubrir la ubicación exacta de Alya, la encargada de la fragua, y habla con ella.

 

Habla con Thane
Tras hablar con Alya, ve al otro extremo de Tripetra hasta que encuentre la entrada del Valle del Padre de Piedra. Allí te encontrarás con Thane, un entrenador muy experimentado del que puedes aprender nuevas técnicas de combate. También puedes enfrentarte a él en una pelea (misión secundaria), pero piénsatelo muy bien ya que un solo golpe suyo es suficiente para finalizar el enfrentamiento. Aunque no pierdes vida cuando caes derrotado, intentarlo es casi misión imposible en este momento.

En busca del Caldero
Entra en el Valle del Padre de Piedra. Lánzate al lago para conseguir dinero del barquero y luego escala por la pared para volver al principio. Ve por el camino de la derecha y rodearás hasta la puerta que hay al otro extremo del agua estancada. Una vez hayas pisado los verdes prados del Valle, convoca a tu caballo para hacer el camino más rápido.

A la izquierda encontrarás más dinero. Si vas por el camino que hay a la derecha del ojo puedes recoger una página del Libro de los Muertos. El otro camino que te queda, conduce hasta el Peñasco Llorón, lugar donde encontrarás a Vulgrim el comerciante.

Ve de nuevo a la derecha y entra en el Bosqueruín. Primero verás unas ruinas cerca de ti por la que pasean varios enemigos. Una vez derrotados, entra y sube para llegar hasta el cofre. Esta zona es la primera gran área que te permite exploración a fondo.

En el centro de todo hay una especie de altar con otro cofre. Tu objetivo es dirigirte al Paso Abrasado, al este del Bosqueruín. Una vez allí, toma el camino que lleva al sur para llegar hasta el punto de la misión. En cuanto te aproximes, empezará el siguiente objetivo.

Si te quedas cerca de él, será más fácil sobrevivir, ya que arrasa con los enemigos de un golpe y a penas permite que se acerquen. Después, habla con él y prepárate para el siguiente objetivo.

Restablece el Fuego de la Montaña
Tras hablar con Karn se abrirá una puerta ante ti. Crúzala y gira la llave, se abrirá la puerta del fondo. Al otro lado te espera “El Caldero”, tu primer templo. Puedes comenzar abriendo los dos cofres que hay en la sala. El primero es fácil, pero con el segundo tendrás que utilizar la bola explosiva que hay en la sala. Cuando quieras continuar, coge otra bola y lánzala al interruptor de la pared.

Cruza la puerta de la derecha y derrota a los enemigos de la sala. Verás una puerta cerrada con llave y otra abierta. Sigue por esta última y cruza el fuego por la pared de la izquierda. Dobla la esquina y verás otra bola explosiva, inalcanzable a simple vista. Tras ella hay una enredadera, sigue el recorrido para ver donde empieza y recórrelo. Coge el explosivo y pégalo al interruptor de la pared.

Pasa a la siguiente sala y derrota a todos los enemigos que aparecen. Continúa por la única puerta y en mitad del pasillo verás un cofre. Dentro está el mapa de la mazmorra. Avanza hacia la siguiente sala y te encontrarás un acechador luchando contra varios guerreros. Puedes dejar que se dañen entre ellos y luego rematarlos (el acechador te pondrá las cosas difíciles).

Cuando termines con ellos, abre el cofre de la cámara contigua y coge la llave. Corre por la pared y sal de la zona. Regresarás a la sala con la puerta cerrada que vimos antes. Utiliza la llave y mueve la bola que hay al otro lado. Ponla sobre el agujero y se abrirá un camino por la pared. Trepa y salta a la derecha para coger el cofre, luego vuelve a la izquierda y sigue por la enredadera.

Ve hasta el final y verás dos cofres. El primero está a la vista, al segundo puedes llegar trepando por la pared y saltando hacia la derecha. Trepa de nuevo por la pared y sigue hacia la izquierda. Gira la llave y continúa por la puerta que se abre. Entra en la primera de la derecha y te encontrarás en una sala amplia.

En el centro hay un cofre cerrado tras una verja. Si observas el suelo verás un camino de baldosas que lleva a dos interruptores a ambos lados de la puerta. En el suelo hay un tercer interruptor que lleva a una bola bloqueada tras otra puerta.

Busca la bomba que hay en una pequeña cámara de la zona. Destruye el cristal que hay al lado y coge la segunda bola. Colócala en el tercer interruptor y se abrirá la puerta de la primera bola. Hazla rodar hasta uno de los interruptores que controlan la puerta. Ahora coge una bomba y pégasela a la segunda bola, de esta forma saldrá del hueco y podrás ponerla en el segundo interruptor de la puerta.

Dentro hay una llave, cógela y vuelve a la sala anterior. Ahora ya puedes abrir la puerta. Gira la llave que hay pegada a la columna y subir a una plataforma. Ahora debes ser rápido, corre por la pared de la derecha y trepa a lo alto de la plataforma antes de que descienda de nuevo. Rodea la zona y salta por la puerta de la derecha.

Sigue hasta el final de la sala y trepa por los salientes de la pared. Luego corre rodeando la zona y finalmente trepa a lo alto. Camina hasta el borde del foso de lava y a tu izquierda verás una bomba. Si quieres coger el cofre que había abajo, tira la bomba contra el cristal y salta al suelo. Coge el tesoro y repite la operación para volver a subir. Una vez arriba, coge la bomba y tírala al interruptor que hay en frente.

Gharn
Cruza el puente y sube las escaleras para conocer a Gharn. Este jefe es bastante lento, así que no te costará acabar con él si golpeas y esquivas rápido. Evita su puñetazo-cuchilla y aprovecha a golpear cuando se arrodilla, pero aléjate rápido antes de que te pille la explosión.

Derrótalo y sigue por la puerta Abre el cofre que hay en mitad del pasillo y después el de la sala contigua. Gira la manivela que hay en el centro hasta bajar por completo las pesas. Enhorabuena, has restablecido la fragua. Sal por la puerta que se acaba de abrir y baja las escaleras para conseguir el último cofre del templo. Sal por la puerta y regresa a la fragua para hablar con Alya.

LÁGRIMAS DE LA MONTAÑA

Habla con Karn
Tras restablecer el fuego de la forja, cabalga al Valle del Padre de Piedra y habla con Karn.

Encuentra Fortagua
Nuestro camino va más allá del Desfiladero de las Sombras. El problema es que la puerta está cerrada. Saca la pistola y dispara a las úlceras. Sigue el sendero y llegarás a un valle con merodeadores y aguijoneadores. Mata desde el caballo a los merodeadores y después destruye el nido naranja que hay de la zona, de esta forma dejarán de aparecer los molestos insectos.

En la zona verás un grupo de piedras rodeando una bomba pegada a la pared. Dispara a la bomba y trepa por el camino que se despeja. Al otro lado verás una pared llena de bombas. Acércate a ella y comenzarán a surgir enemigos. Dispara a los aguijoneadores y aprovecha las bombas para dañar a los enemigos siempre que puedas.

Cruza la puerta por el otro lado y cabalga hasta el final de sendero. Está plagado de acechadores y merodeadores así que ve con cuidado. Al final hay una puerta y una palanca justo al lado. Acciónala y cruza el Fiordo. Por aquí el camino es lo mismo, pero más duro.

Nada más entrar, puedes subir a la colina de la derecha para hablar con Raíznegra y conseguir la piedra señuelo que activa la misión secundaria.

Restablece las Lágrimas de la Montaña
Estás a las puertas de Fortagua, un enjambre de aguijoneadores sale a recibirte. Acaba con ellos disparando y cruza el pasillo. Llegarás a una sala con una puerta cerrada y un hueco en medio. Trepa por el muro de la derecha y coge la bomba que hay arriba. Tírala contra la bola y luego dispara para detonarla. Baja e introduce la bola en el hueco. Cruza la puerta y estarás a las puertas del templo.

Bien, ante ti tienes un cofre que no cogeremos de momento. Si observas el mapa verás dos puertas. Comenzaremos por la de la derecha (antes de entrar puedes saltar abajo y recoger el cofre, dobla la esquina y verás el camino que te devuelve a la parte superior).

Caldero 1
Cruza la puerta de la derecha y llegarás a un pasillo con dos cofres, uno en el hueco de la pared a la derecha y otro saltando el canal a la izquierda. En el mapa verás que hay dos puertas. La de la derecha lleva a un combate duro, pero tienes como recompensa un cofre con objetos especiales. Para conseguirlo tendrás que derrotar a una horda de agujoneadores (utiliza la pistola) y a varios merodeadores. Después te enfrentarás al peñasco de la piedra. Aléjate de él, esquiva y ataca por la espalda. Si salta... toma distancia rápido.

Recoge tu recompensa y vuelve a la sala anterior. Sigue por la puerta norte y cruza el pasillo eliminando a los tres merodeadores. Llegarás a una sala amplia con una estatua. Bucea por el lago de la derecha y recoge el cofre. Vuelve a la zona anterior y sube por la pared de la izquierda.

Estás ante el recorrido que te lleva a la bola. Corre saltando por la pared y sigue el camino hasta el final, empuja la bola y métela en el hueco. Déjate caer y sube por el saliente que hay a la izquierda de la puerta que ves al fondo. Cruza el arco de piedra y abre el cofre para obtener el mapa.

Cruza el arco de piedra y déjate caer en la sala contigua. Verás una bola atrapada por la corrupción y un cofre tras las columnas. A la derecha hay una pared por la que puedes trepar. Coge una bomba y libera la pelota. Salta al suelo con una bomba en la mano y destruye la corrupción.

Una vez que hayas liberado la pelota, hazla rodar y ponla justo frente a la puerta que permanece cerrada. Coge una bomba y pégasela a la bola. Salta al altar del centro y pisa el interruptor. Mientras la puerta está abajo, dispara a la bomba y la bola rodará hasta la siguiente sala. Ponla en el hueco y se abrirá la puerta central.

Sube las escaleras y cruza la puerta. Cuidado porque a la vuelta de la esquina hay una colmena de aguijoneadores. Utiliza la pistola para abrirte camino hasta ella y destrúyela lo más rápido que puedas. Sal por la puerta del fondo y destruye la corrupción con la bomba. Activa la palanca y empezará a fluir el agua.

Salta al canal y presta atención al cofre que hay a la izquierda, llegando casi al final. Ponte a su altura y trepa por la pared para alcanzarlo. Déjate llevar por la corriente y sigue hasta llegar a la sala principal.

Caldero 2
El agua ha inundado toda la parte inferior del templo. Tírate al agua y bucea por el pasillo que hay en el fondo. Sigue hasta el final y trepa por la pared. Cuando llegues a lo más alto verás que tienes dos posibles caminos. Si tomas el de la izquierda y corres por la pared llegarás al cofre que está en lo alto.

Vuelve a trepar por la pared y toma el camino de la derecha. Trepa hasta arriba y afila tus armas. Tendrás que derrotar a un grupo de merodeadores, pero el verdadero reto está en el Acechador salvaje que aparece después Acaba rápido con los merodeadores para poder enfrentarte a él sin problemas. Muévete rápido esquivando sus ataques y mátalo.

Tras derrotarlo, sigue por la única puerta abierta. Cruza el pasillo y llegarás a una zona con dos puertas cerradas a cada lado. Salta por el hueco sobre el conducto y sigue hacia la zona que está sin explorar. Déjate caer por el hueco y entra en el túnel que hay en la parte inferior. Dentro hay un cofre con una llave esqueleto.

Regresa al pasillo anterior y utiliza la llave para abrir la puerta. Sigue hasta llegar a la sala amplia y verás un puzle. Antes de empezar, ve hacia la derecha y sigue el circuito de la pared para llegar hasta el cofre. Vuelve a la entrada y trepa por el saliente de la izquierda. Coge la bomba y destruye la corrupción. Ahora sólo tienes que empujar la bola (de un puñetazo) y colocarla en el hueco.

Vuelve a la sala anterior y coge otra bomba. Pégasela a la bola y pone encima de la plataforma que acabas de descender. Detona la bomba y te subirá hasta las escaleras. Cruza la puerta y verás una palanca. Antes de activarla, dispara a la bomba que hay en la izquierda, en la corrupción que bloquea la compuerta. Ahora ya puedes activar la palanca.

Sigue el curso del agua hasta el final y después trepa por la pared. Activa una tercera palanca y cruza la puerta que se acaba de abrir hasta la sala principal. Ahora ya puedes recoger el primer cofre que encontraste al llegar al templo. Trepa al saliente y rodea el canal de agua por la derecha, salta tras los pies de la estatua y abre el cofre. Cuando estés listo para continuar, sigue por la puerta del centro. Salta al otro lado del agua y prepárate para el combate final.

En medio de la sala verás una bola. Empújala contra la roca del centro y aparecerá Carcino. Es un enemigo duro, tanto que no puedes hacerle daño con simples golpes. Espera a que embista y caerá otra bola. Debes aprovechar el momento para empujarla contra él y después atacar.

Es importante que antes de agarrar la bola apuntes bien carcino, así sólo tendrás que pulsar el botón y ganarás mucho tiempo. Ten en cuenta que cada vez que aparece una bola surge un nuevo enemigo. Ignóralos y céntrate en lanzar la pelota. Golpea su vientre con tus ataques más potentes, si tienes alguno de área aprovecha a utilizarlo cuando se acercan el resto de enemigos.

Además de la embestida de Carcino, debes tener cuidado cuando salta para machacar el suelo, salta a la vez y evitarás la onda expansiva. El segundo ataque son las zarzas que lanza por el suelo. Esquiva en dirección a ellas y luego salta a un lado para evitarlas (debes ser muy rápido). Derrota a la criatura y activa la palanca que hay al final de las escaleras. Ahora sólo tienes que regresar con Alya para comenzar la próxima misión.

MOVER UNA MONTAÑA

Encuentra el templo perdido
Viaja hasta el Bosquerruín y entra en el Rincón, al norte del bosque. Dentro verás un constructo desactivado. Súbete encima y rueda hasta colocarte sobre el hueco del suelo. Dispara la cadena al interruptor de la pared y luego crúzala para alcanzar la puerta.

Una vez al otro lado, despeja de la zona de enemigos. Cuando termines recoge la bomba que hay en la pequeña cámara y utilízala para romper la corrupción que esconde el cofre y el camino bloqueado. Trepa por la pared y sigue el camino de vigas de madera hasta dejarte caer en una escalera.

Baja hasta la sala abierta y destruye la colmena de aguijoneadores. En la parte sur de este lugar, verás una palanca que abre dos caminos a ambos lados de la misma. Las escaleras que suben son un atajo hacia el principio del templo. Las otras, descienden hasta el mismísimo Inframundo. A la izquierda, encontrarás una puerta que está abierta, y de hecho, es el único camino a seguir. Entra y salta por las vigas horizontales de la pared.

La que está situada en el medio, te permite escalar hasta la zona superior y de ahí, saltar a la última viga. Como verás es ligeramente distinta a las demás. El motivo es que esta viga y la que está situada debajo de ella liberan la bola que hay al otro extremo.

Cuando hayas desactivado la primera barrera, déjate caer a la siguiente y ya tendrás la bola. LA palanca que hay cerca de la entrada activa un elevador, bájalo y coloca la bola en él para subirlo. Escala por la pared que hay a la izquierda de la puerta y usa también esa palanca para colocar el otro ascensor a medio nivel.

A continuación, ve por un extremo y lánzate hacia el lugar donde colocaste la bola. Cógela y mándala con fuerza al otro elevador. Baja y usa de nuevo la palanca para que el elevador que contiene la esfera, suba y puedas colocarla en su sitio.

En esta sala hay dos cofres que puedes recoger, cuando hayas terminado sal por la puerta y llegarás de nuevo a la zona de la colmena. Toma el camino que está junto a ésta y sigue la pista del cuervo hasta la próxima salida.

No es difícil encontrar las zonas por las que tienes que escalar, preocúpate de deshacerte de los enemigos sin sufrir demasiados daños. Ya has conseguido superar el Ríncón, ahora ve hasta el lugar indicado en el mapa y habrás llegado al Templo Perdido.

Despierta al Constructo
En cuanto hayas entrado al Templo, tres merodeadores irán a por ti, así que no bajes la guardia después cruzar la puerta. Sube las largas escaleras que te llevan a la siguiente sala y activa el constructo. Úsalo para destruir la corrupción que bloquea el pasillo y bájate de él en cuanto hayas encajado la bola en el hueco.

A continuación tendrás que luchar contra un centinela. No es excesivamente difícil derrotarle, aunque sí tienes que ser muy rápido esquivando. Si acabas primero con los dos enemigos que le acompañan, lo demás es sólo moverse y atacar en el momento adecuado.

El Centinela es inmune cuando está rodeado de un aura dorada. Sin embargo, siempre que se coloca sobre ti para atacarte, queda vulnerable a tus golpes. Salta y ataca en el aire unas cuantas veces para acabar con él.

Toma el camino del sur escalando por el muro. En la sala de Constructo, usa la pared de la izquierda para cruzar al otro extremo. Una vez allí, apunta hacia la corrupción y utiliza el brazo extensible para destruirla y dejar a la vista una palanca.

Cuando la actives subirás un puente, necesario para cruzar al otro lado con el coloso. También aparecerán un grupo bastante numeroso de enemigos, así que tu mejor opción es subirte al Constructo y comenzar a dar golpes.

Rueda con él hasta la sala anterior y aprovecha para recoger el cofre que hay en medio del pasillo, tras la corrupción. Ve a la sala anterior y colócate sobre el hueco que hay en el suelo. Lanza la cadena y cruza por encima de ella. Si te dejas caer al agujero podrás conseguir el cofre que hay abajo.

Una vez al otro lado, primero dispara a las bombas de la pared para hacer caer la esfera. Sitúala en su lugar y mata a los enemigos que aparecerán en este momento. Después sitúate junto a las bombas que hay cerca de los últimos barrotes. Coge una y lánzala contra la esfera. Detónala disparando y ya tendrás el camino libre hasta la llave. Regresa y abre la puerta cerrada de la sala principal.

Trepa por la pared y el techo hasta llegar al otro lado donde se encuentra la siguiente palanca. Una vez accionada se abrirá el camino. Monta de nuevo sobre el Constructo y destroza la corrupción de la izquierda para conseguir el mapa de la mazmorra.

Justo en el lado opuesto puedes alcanzar otro tesoro utilizando la cadena. Lo que realmente nos interesa es la sala del centro. La lucha que te espera va a ser realmente dura. En total tendrás que derrotar 5 Centinelas, cada uno con su grupo de enemigos.

Para empezar, recuerda que a los centinelas les rodea una esfera que les protege, espera a que el escudo desaparezca para dañarle. La pistola es un buen método para aprovechar si estás lejos de él, le bajarás la vida con rapidez.

Por otro lado, las hordas de enemigos son constantes, y a cada cual más fuerte que la anterior. La primera tanda puedes resolverla deshaciéndote de ellos y que del Centinela. Pero durante las siguientes, el propio Centinela seguirá creando monstruos que lo defiendan, por lo que acabar con él pasa a ser tu prioridad.

Son especialmente duras las dos últimas batallas. Guarda tu mejor repertorio para este momento, recuerda: reserva alguna poción, tanto de vida como de ira. También te vendrá genial si logras acumular energía suficiente para la transformación en segador.

Si lo utilizas en el último combate, podrás acabar rápidamente con ambos enemigos, así como con el centinela que los protege. Tras el combate, cruza la puerta y toma el camino de la izquierda. Atraviesa el precipicio corriendo por la pared y saltando de una a otra cuando te vayas a caer.

Asciende por las paredes que están en paralelo hasta la parte más alta de la sala. Continúa por el camino del río y abre los cofres que hay en los alrededores. Tras la siguiente puerta, encontrarás un Constructo apagado. Súbete en él y colócalo sobre el elevador. Escala el muro de la izquierda y sigue subiendo aprovechándote de los salientes de madera. Ve por la izquierda y llegarás hasta otro Constructo apagado.

Éste segundo debes colocarlo encima del interruptor que hay cerca del elevador, y así hacer que suba el primero. Ahora solamente tienes que poniéndolo en los huecos para ir abriendo los correspondientes caminos. Fíjate en el suelo y sigue el rastro de las runas para localizar todos los huecos esféricos.

Una vez en el exterior, sigue el juego de plataformas que hay en el muro de la izquierda. Primero corre por la pared hasta el saliente y déjate caer sobre la primera viga. Sigue hasta que llegues a un lugar abierto y circular, cuidado porque aquí serás víctima de una emboscada.

Los merodeadores salvajes no son enemigos nuevos, pero si te costará superar esta pelea ya que son un grupo bastante numeroso. Por si fuera poco, el combate termina con dos acechadores muy malhumorados. De nuevo, la diferencia entre la vida o la muerte puede ser la energía de segador. Si consigues acumular suficiente para la transformación, tendrás una oportunidad frente a los dos últimos enemigos.

Cuando consigas vencerlos, cruza la puerta y escala el muro que hay al fondo. Arriba del todo encontrarás la esfera que necesitas para activar el mecanismo del piso inferior. Tras la estatua que la sujeta, hay unas bombas. Dispara y la bola caerá directamente al suelo.

Cuando estén las puertas abiertas, toma la que lleva al oeste. Ahora de nuevo tendrás otro duro combate. Saca fuerzas porque ya estás casi al final del camino. Si tienes un arma potente, aunque sea lenta puedes sacar ventaja. Procura mantener a los dos enemigos muy juntos, haz que avancen hasta a ti y cuando vayan a golpearte salta hacia atrás.

Ahora usa el ataque fuerte y retírate. Muévete recorriendo el pasillo de arriba a abajo y repite la táctica varias veces con mucha paciencia. Tras vencer a uno de ellos aparecerán más refuerzos. Aunque de menor nivel, un grupo numeroso de enemigos siempre entraña un grave peligro. También puedes romper las cajas que rodean la sala para encontrar alguna poción.

Constructo mole
Prepárate porque ahora sí es la lucha definitiva. Para poder acabar con él, tienes que recoger las bombas que caen del techo cuando golpea el suelo. Salta para esquivar la onda expansiva o aléjate. Luego ve corriendo hacia donde están las bombas y coge una antes de que explote.

Lánzasela y detónala con un disparo para que el núcleo quede al descubierto. Tendrás que repetirlo varias veces, y con cada bomba que explote sobre él, aparecerán más enemigos. Es recomendable acabar con estos para facilitarte el trabajo, aunque no te olvides que tu verdadero objetivo es el gran coloso.

Ahora sal y abre los cuatro cofres que hay a ambos lados de la cerradura. Cuando estés listo, introduce la llave y prepárate para conocer a custodio. Tras un breve diálogo, abandonarás el lugar en busca de tu siguiente objetivo.

Habla con Eideard
Tras despertar al Custodio, regresa a la fragua y habla con Eideard. Después haz los preparativos que necesites, compra pociones, armas, movimientos... y vende lo que no quieras. Antes de partir hacia tu siguiente destino puedes combatir contra Karn. Si no lo has derrotado ya, ahora deberías estar en condiciones de hacerlo. Cuando lo hagas podrás acceder a las misiones secundarias del segador.

CORAZÓN DE LA MONTAÑA

Habla con el Custodio
Tras pasar por la Fragua del Hacedor, encontrarás a Custodio en el exterior. Habla con él y te dará el siguiente objetivo. Además, en esta ocasión no viajarás solo. Than te acompañará a lo largo de la Fundición. Tras el diálogo, el puente que lleva al otro lado se alzará de nuevo. Antes de entrar en la fundición puedes explorar a la izquierda de la puerta y abrir el cofre escondido.

Entra en la Fundición
Cruza las primeras puertas hasta que llegues a un pasillo semicircular. Llega hasta el otro extremo y aprovéchate de la fuerza de tu compañero para que te lance a la plataforma. Escala el muro hasta que estés situado justo encima de la viga de madera. Déjate caer sobre ella.

Espera a que pase uno de los calderos para agarrarte a él. Rodea hasta situarte al otro lado y salta a tierra cuando tengas la ocasión. Corre por la pared para superar la lava y abre la puerta tirando de la palanca. No te olvides de recoger el cofre próximo utilizando el saliente para llegar hasta él.

En la siguiente zona te encontrarás un atajo que comunica con la primera sala. Súbete a la viga que acciona el mecanismo de la puerta y espera a que tu compañero se sitúe bajo ella. Mientras la esté sujetando, pasa al otro lado y enseguida encontrarás al Guardián.

Despierta al Guardián

Toque espectral
Toma el camino que va al noreste y acércate a la pared de la derecha para que tu compañero te preste ayuda. Después de abrir el cofre, déjate caer al agua y bucea hacia el noreste de nuevo. Sal a la superficie y escala la pared. Ignora la bola por el momento y ve por el camino que está tras ella.

Zambúllete de nuevo en el agua y te encontrarás dos caminos. El de la izquierda lleva hasta un cofre y te devuelve de nuevo a este lugar. El de la derecha te conduce hasta un muro que debes escalar para activar el interruptor que libera la bola.

Salta hacia ella antes de que la barrera vuelva a su sitio. Mientras tu compañero sujeta la puerta, saca la esfera y lánzala con fuerza contra el hueco de la pared (busca el rastro de las runas). Ahora que el Constructo está liberado, úsalo para hacerle frente a la horda de enemigos que está por venir.

Después líbrate de la corrupción de los alrededores para conseguir varios tesoros y abrir un túnel con la sala anterior. Colócate sobre el hueco del suelo y usa la cadena para crear un puente. Sube a la cadena y salta hacia la derecha paralelo a la pared para abrir el cofre. Regresa a la cadena, salta hacia las lianas de la pared y podrás alcanzar las vigas de madera.

Pasando de una a otra llegarás hasta una puerta que conduce a la siguiente sala. Corre por la pared de la derecha y no te precipites porque te puede caer un gran charco de lava en la cabeza. En la siguiente sala te espera un combate. Primero derrota a los dos tríos de enemigos antes de enfrentarte contra el jefe. Si tienes energía de segador, úsala con él y prácticamente estará muerto. Atraviesa la puerta y abre el cofre para conseguir una llave.

Ve hasta la puerta de la cerradura regresando por la cadena del Constructo. Salta al otro lado con la ayuda de Karn y librarás una batalla antes de que desaparezca el bloqueo de la puerta. Antes de cruzarla, salta al hueco de la derecha y recoge el mapa de la mazmorra.

Cruza la puerta y libera el poder golpeando las cadenas. Recibirás el toque espectral, con el que puedes alcanzar objetos lejanos. Vuelve a la sala anterior y lánzalo contra la argolla del techo para cruzar el abismo. Una vez en el pasillo, mira a tu derecha y verás un bomba tras una corrupción. Lanza tu nuevo poder y coge la bomba, destruya la corrupción y abre el cofre. Después sigue a Karn hasta la sala por donde entraste.

Corazón de piedra 1
Regresa a la primera sala del centro y toma el camino de la izquierda, el que tiene un foso de lava. Coge la bomba con tu nuevo toque espectral y tírala contra la palanca. Cruza la puerta y salta por las vigas de la izquierda para llegar a otra palanca.

Acciónala y trepa por la pared de tu espalda. Una vez en la viga, salta y lanza el gancho en el aire. Cruza las enredaderas y suéltate y aterriza junto a la segunda palanca. Regresa por la pared a la zona central y cruza el puente. Activa una última palanca en la sala circular y bajará la plataforma.

Una vez abajo, sigue todo recto por el pasillo hasta encontrar el corazón de piedra. Ayúdate de tu compañero para saltar a la izquierda. Sigue el circuito de vigas y presta atención para lanzar el gancho a mitad de camino. Sigue hasta el otro lado y pulsa el interruptor que abre la puerta. Lanza el gancho a Karn y te impulsará al otro lado. Sigue el circuito y recoge el cofre que hay a mitad de camino, en lo alto de los salientes. Continúa hasta el final y déjate caer cerca de la lava. Cruza la pared corriendo y activa el constructo.

Sube encima y camina a través de la lava. Recoge el cofre que hay a la izquierda y luego despeja la corrupción del camino. Sigue hacia la derecha y coloca el robot en el hueco. Lanza la cadena y trepa por ella. Salta al saliente de la izquierda y llegarás ante el corazón de piedra. Agárralo con el toque espectral y Karn se encarga de llevarlo.

Regresa con él al ascensor y activa la palanca. Mientras sube tendrás que enfrentarte a una horda de guerreros. Karn te ayudará, así que no deberías tener muchos problemas. Puedes aprovechar para probar el toque espectral. Fija a los enemigos y agárralos para atraerlos hacia ti. Puedes combinar el movimiento con un combo aéreo y seguir atacando. Una vez arriba, regresa a la sala principal y Karn dejará el primer corazón.

Corazón de piedra 2
Tras colocar el primer corazón de piedra sobre el guardián, verás un camino que se abre a tu izquierda. Utiliza el gancho para cruzar al otro lado y sigue por el conducto. Continúa hasta la siguiente sala y toma la primera tubería de la izquierda. Sigue hasta el final y pisa el interruptor que hay entre las dos puertas. Karn te ayudará a cruzar la puerta y después te impulsará al otro lado.

Cruza utilizando el gancho y después activa el constructo que hay al doblar la esquina. Colócalo en el hueco de la derecha y lanza la cadena. Después ve al pilar del centro y gira la rueda para subir al constructo. Corre por la esquina izquierda y trepa hasta la cadena antes de que baje. Después salta al saliente de la izquierda y sigue el circuito hasta la enredadera del final y finalmente la palanca.

Vuelve a la sala anterior y sube al constructo. Sigue por el puente que acabas de levantar y continúa hasta llegar ante el corazón de piedra. Una vez allí, recorre la sala sobre el constructo y límpiala de enemigos. Ahora ve a la izquierda del corazón y verás el circuito que debes completar. Tírate al agua y trepa por la enredadera. Sigue hacia la derecha y utiliza el gancho para trepar a lo más alto.

Una vez arriba, ve hacia la izquierda y recoge el cofre que está en la ladera de la montaña. Tírate al agua y trepa por la pared con ayuda del gancho. Sigue hacia la izquierda y sube a la terraza. Elimina a los merodeadores que hay arriba y activa la palanca que hay justo al lado. Esto abrirá el canal de agua.

Salta a la cornisa inferior y trepa hasta el tejado de enfrente para recoger el cofre. Después regresa a la sala donde está el corazón. Coge al constructo y destruye la corrupción que hay en la esquina derecha de la sala (esquina inferior izquierda si te fijas en el mapa). Espera a que se acerque Karn y te impulsará para subir.

Abre el cofre que hay arriba y coge la llave que utilizarás para abrir la puerta cerrada en la misma sala. Dentro encontrarás un peñasco de la tierra, deja que se centre en tu compañero y atácale por detrás. Regresa a la sala anterior y sube al constructo. En la esquina superior izquierda del mapa verás un ascensor. Pon encima a la máquina y después activa la palanca que hay justo al lado.

Tu juguete desaparecerá, pero a cambio recibirás una bola. Empújala hasta la sala contigua y ponla en el hueco del suelo. Trepa por la pared y cuando llegues arriba, lanza el gancho para conseguir el segundo corazón de piedra.

Regresa a la sala anterior y verás que ha aumentado el nivel del agua. Salta a la izquierda y trepa por el saliente de la pared. Sigue el circuito hasta encontrar unas vigas en la pared. Trepa por ellas y corre hacia la derecha para cruzar el río. Estarás de nuevo en la entrada, cruza el mismo conducto del principio hasta el interruptor de las puertas dobles. Púlsalo y regresa por el mismo conducto a la entrada principal.

Corazón de piedra 3
Hemos recuperado 2 de los 3 corazones de piedra. Para ir a por el tercero, acércate a Karn y te impulsará al otro lado de la verja. Encontrarás una palanca, muévela y se abrirá la puerta. Regresa a la sala anterior, activa el constructo y llévatelo contigo hacia el interior del pasillo, destrozando la corrupción que bloquea el paso.

Llegarás ante el corazón de piedra. Despeja la corrupción de la zona y verás un hueco en el medio de la sala. Coloca encima al robot y se abrirá una puerta en la pared de la derecha. Trepa por ahí y sigue el circuito que te lleva hasta el corazón. Libéralo y prepárate para luchar.

Tu propia máquina se vuelve contra ti. Por suerte no es difícil de vencer, sólo salta esquivando sus golpes, rodéalo y ataca por detrás rápido antes de volver a alejarte. Sólo debes tener especial cuidado con su ataque giratorio. Derrótalo y regresa a la sala principal con el último corazón.

Sigue al guardián
Has despertado al colosal guardián... y se ha ido. Sal de la sala por el camino que está al noreste y sigue por los pasajes que pasan a la derecha del pasillo principal que lleva a la entrada y tiene las puertas cerradas (mira el mapa para conocer el camino). La salida está al norte del templo.

Una vez fuera, ve a la fragua y compra pociones y todo lo que necesites antes de continuar (ya que luego no podrás volver). Cuando estés preparado, dirígete a pie hasta el Valle del Padre de Piedra (el viaje rápido está desactivado). Cruza el valle y verás al Guardián... esperándote.

Ponte cómodo para disfrutar de un combate épico. Comienza montando a caballo y esquiva su martillazo. Cabalga en paralelo a toda velocidad y gasta todas tus embestidas mientras descarga su poderoso golpe. Sin bajar del corcel, apunta con la pistola y dispara a las bombas que tiene pegadas al brazo.

El punto débil quedará descubierto, más o menos a la altura del codo. Galopa hasta allí y desmonta. Agárrate con el toque espectral al punto y golpea hasta destruirlo. Repite la operación una segunda vez y empezará a lanzarte bolas explosivas.

Sube al caballo y dispara a las bolas hasta que exploten. Cuando lo hacen, se elevan del suelo y avanzan en tu dirección. En este momento ponte detrás del coloso para hacer que la bola choca contra él. El guardián pone su brazo en el suelo al caer, trepa por él y utiliza el gancho para alcanzar el punto débil. Golpea y repite la operación por segunda vez para derrotarlo.

EL ÁRBOL DE LA VIDA

Ve al Árbol de la Vida
Inmediatamente después de derrotar al guardián tendrás el camino despejado para llegar hasta el Árbol de la Vida. Cabalga sobre Desesperación hasta la Cueva Verde y finalmente habrás llegado a tu destino. Es un objetivo muy sencillo, sólo tienes que disfrutar de la escena y analizar el devenir de los acontecimientos. Con esto completarás por fin la misión El Árbol de la Vida.

EL SEÑOR DE LOS HUESOS

Encuentra el Trono Eterno

La Brecha
Cuando estés en el Reino de los Muertos, tienes que tomar el camino que va desde el árbol hacia el sur. Puedes comprar objetos y pociones al nuevo mercader, y si te has dejado alguna misión por completar no te preocupes, ya que puedes regresar en cualquier momento utilizando el portal que comunica con el País de Las Fraguas.

En cuanto hayas cruzando el País de los Peñascos, empezarás a ver los primeros enemigos. Esqueletos que no entrañan un grave peligro, aunque quizás te sorprendas por la rapidez y la agilidad con la que se mueven. Sigue el icono de misión señalado en el mapa.

Al llegar, cruza la puerta y habrás entrado en la Brecha. Pasa la primera pared corriendo y usando la garra en el momento preciso. Trepa por el muro y al llegar a las vigas de madera, comienza a bajar hasta que llegues al suelo. Pese a los varios caminos, sólo puedes avanzar por uno.

Uno de los interruptores del suelo desactiva una barrera de pinchos que se extiende a lo largo de un pasillo sin suelo. Despeja el camino y cruza aprovechándote de la pared. Salta en el último momento para agarrarte al borde. Ve a la sala de la izquierda y enfréntate a varias hordas de esqueletos. Ten en cuenta que hasta que no termine el combate no podrás abandonar la zona.

Sal por la puerta de la derecha y verás una manivela a la izquierda. Al lado hay una bomba, cógela y colócala en el hueco de la pared, donde falta un ladrillo a la derecha de la manivela. Después coge otra bomba y ponla en la palanca. Cruza el puente y desde el otro lado, dispara a la bomba que está en el hueco. La explosión activará la palanca y subirá un puente al otro lado.

Después de conseguir la llave aparecerán varios escarabajos voladores, el mejor método para acabar con ellos es la pistola. Llega al otro extremo subiendo por la viga de madera que hay a un lado, y después abre la puerta cerrada de este nivel con la llave que acabas de conseguir.

Avanza hasta llegar a un precipicio. Corre por la pared y agárrate a la viga para luego descender por ella hasta el final. Deshazte de los dos esqueletos y sigue por el camino hasta que llegues a la salida. En la última sala vuelven a aparecer más esqueletos.

Para conseguir el cofre de esta zona, ve detrás de la estatua grande y coge la bomba. Lánzala sobre la corrupción que hay justo encima de ésta. Ahora puedes subir aprovechándote de la pared y el saliente que hay a la derecha de la salida. Escala y cruza la sala hasta llegar al cofre.

El Buche
Ahora puedes volver a cabalgar sobre Desesperación para moverte por esta zona. Ve por el puente y toma el camino que hay a la derecha en dirección al objetivo de misión. Por el camino te encontrarás con varios enemigos aunque es decisión tuya si hacerles frente o no.

Sube hasta la cima y antes de tomar la senda principal, examina la zona que hay al sur para conseguir un cofre y una reliquia. En el paso de una zona a otra te encontrarás con Vulgrim, así que comercia con él si lo deseas y ponte en marcha otra vez hacia el Pico de la Serpiente. Cuando llegues, acércate a la campana y disfruta de la secuencia.

Entra en la sala del trono

El Trono Eterno
Sigue el camino y antes de llegar a la plataforma giratoria, date media vuelta y busca un pequeño camino paralelo que conduce hasta un cofre. Regresa y sube por la pared. Toma el camino de la izquierda y trepa por el muro. Usa la garra para saltar hacia la plataforma que se balancea de un lado a otro.

Espera a que el salto sea favorable y ve hacia la plataforma estática que hay a la izquierda. De nuevo, ten paciencia hasta que el “péndulo” se coloque cerca de ti y puedas saltar. Finalmente, utiliza la garra para cruzar el último precipicio. Abre el cofre que hay a la derecha y luego ve por el camino hasta el siguiente salto.

Cuando estés en la viga, gira a la cara de la izquierda y sigue trepando hasta que te agarres al saliente de madera. Sube unos metros en vertical por la pared y salta a la viga paralela que hay justo detrás de ti. Sigue el juego de plataformas por todo el lateral de la nave hasta que llegues al Trono Eterno. Ve a la sala custodiada por dos guardias y verás una secuencia que finaliza el objetivo.

EL PEAJE DE LOS REYES

Encuentra la entrada a la Arena Dorada
Abandona el Trono Eterno y cuando abras la puerta verás que estás justo en frente de la Arena Dorada. Habla con el comerciante si lo deseas, y luego ve en la dirección que marca el icono de misión. Verás que en cuanto te acerques a la puerta el objetivo cambiará.

Convoca al campeón
Entra en la Arena y baja las escaleras de caracol hasta una sala con un haz de luz en el medio. Gira la estatua hacia la otra puerta para abrirla y recoge los dos tesoros del piso inferior. Cruza la puerta que hay al otro lado y contempla la secuencia antes de recibir el siguiente encargo.

Primera piedra de ánima
Debes colocar tres piedras de ánima en el altar para convocar al campeón. Desde la posición en la que estás, ve hacia la derecha y sube por una pared apta para escalar (justo al lado de la puerta que conduce a la parte baja de la Arena). Ve a la izquierda y abre la puerta.

Baja las escaleras y corre por la pared cuando toque sortear los tramos sin peldaños. Sigue por el camino y llegarás a una sala en la que te espera una batalla. Son dos hordas de esqueletos, la segunda más fuerte que la primera, aunque a estas alturas ya habrás superado momentos más heroicos.

En la siguiente sala debes resolver un pequeño puzzle. Primero colócate sobre el interruptor del centro y usa la garra para recoger una bomba. Destruye la corrupción, la que bloquea el cofre y la que está junto al rayo de luz, que es realmente el objetivo.

Recoge el farol y déjalo sobre el interruptor para la puerta para mantenerla abierta. Corre por la pared hasta el otro extremo y sube para usar la manivela que baja los barrotes. Usa la garra para recuperar el farol y colócalo en la siguiente habitación para abrir la puerta. Acércate hasta la primera piedra de ánima y “coséchala”.

Después de esto aparecerán escarabajos (ya sabes, utiliza la pistola) y cuando acabes con ellos, tendrás vía libre para volver sobre tu pasos. Da media vuelta y cuando llegues a la segunda cámara, sigue el pasillo de la izquierda para conseguir el mapa. Después continúa hasta las escaleras derruidas del principio.

Para salir tienes que utilizar la pared de la izquierda. A medio camino verás una anilla. Déjate caer y te agarrarás a un saliente justo debajo. Trepa hasta arriba, salta hacia atrás y podrás conseguir el cofre. Salta de nuevo al saliente superior y corre por la pared. Sigue recto hasta llegar de nuevo a la Arena. Salta a la arena y acércate al altar utilizando la garra.

Segunda piedra de ánima
Tras colocar la primera piedra de ánima en la estatua, se abrirá una puerta y aparecerán varios guerreros. Acaba con ellos y cruza la puerta que se acaba de abrir. Sube al piso superior y ponte en la cabeza de la estatua, justo encima del cuerno que acabas de colocar.

Si observas las estatuas de la sala verás que apuntan en la dirección que debes seguir. Baja las escaleras en esa dirección y sigue hasta el final de la terraza. Verás una rampa formada por escombros. Trepa al saliente, recoge el cofre que hay arriba a la izquierda y después corre por la pared para llegar a la puerta.

Continúa recto hasta llegar a una sala con un rayo. Sigue la dirección del rayo y subes las escaleras. Una vez arriba, ve hacia el puente colgante y recoge la bomba que está pegada. Con ella puedes romper la corrupción de la zona anterior y conseguir el cofre que hay al final.

Vuelve a por otra bomba y regresa por la puerta por donde entraste, a la sala donde está el rayo. Lanza la bomba a la corrupción que hay justo detrás de la estatua, en la dirección opuesta a donde apunta el rayo. Al otro lado encontrarás más bombas.

Ahora gira la estatua y abre la segunda puerta. Coge la bomba que hay al lado y destruye la corrupción grande de la nueva sala. Regresa al pasillo donde está la bomba y corre por la pared. Al final encontrarás otra estatua. Rótala una vez para conseguir el libro y una segunda vez para continuar.

Sigue el pasillo hasta el final y verás un farol. Cuando lo recojas aparecerá un grupo de esqueletos. Acaba con ellos y lleva al farol hasta la estatua anterior. Justo en frente hay un interruptor, deja aquí el farol para bajar los barrotes. Vuelve corriendo por la pared hasta la sala de la estatua anterior.

Recoge el farol con la garra, gira de nuevo la estatua para abrir la salida y sube las escaleras. Coloca el farol en la estatua y abrirá el camino. Cruza el puente que se acaba de elevar y sigue recto hasta las escaleras de caracol. Baja y llegarás a una pequeña sala donde puedes destrozar el escenario para conseguir algunas pociones.

Sigue hasta la siguiente sala y prepárate para el combate. Tendrás que enfrentarte a un grupo de escarabajos y esqueletos arqueros. Dispara rápido a los insectos y después ocúpate de los esqueletos. Con la zona despejada, recoge la segunda piedra de ánima.

Cuando lo hagas se abrirá un camino a la derecha. Coge el cofre que hay al final y luego trepa por la pared. Utiliza la garra para coger el cofre que hay arriba y después regresa a la Arena activando la palanca que hay a la izquierda de la puerta. Sal fuera y coloca el cuerno en la estatua utilizando la garra.

Tercera piedra de ánima
Hemos encontrado dos de las tres piedras que necesitamos para invocar al campeón. Sal de la arena por la izquierda y sigue por la puerta que está justo encima de la estatua con las piedras. Al otro lado te espera un combate duro, y es sólo la punta del iceberg. En las siguientes salas tendrás que luchar contra hordas mucho peores, así que administrar bien tus recursos será el mayor problema.

En la primera sala te enfrentas a guerreros y varios campeones esqueletos. Utiliza la garra contra los campeones y los dejarás aturdidos un tiempo. Acaba primero con ellos y luego ocúpate de los guerreros. Cuando termine el combate, cruza la puerta y sigue por el pasillo de la derecha.

Al llegar a la siguiente sala te encontrarás otro campeón esqueleto y varios guerreros. Cuando acabes con él llega el verdadero infierno. Un mar de huesos tratará de ahogarte. Decenas y decenas de esqueletos surgen de todas partes. Si no lo has hecho ya, este es el momento de invocar al segador.

Acaba con todos y sigue por la puerta. Al otro lado verás un interruptor en el suelo y una palanca. Pisa el interruptor y coge la bomba con la garra cuando suba el puente. Colócate dentro de la sala del trono y lanza la bomba a la palanca. Cuando explote, la cámara girará llevándote al otro lado.

En la sala te espera la última piedra, pero antes debes derrotar al guardián. Esta especie de guerrero mosca parece más de lo que es. Utiliza la garra para acercarte a él rápidamente, luego esquiva rodeándolo y ataca de nuevo desde la espalda. Derrótalo y coge la última piedra.

Para salir de la sala sólo tienes que girar de nuevo la palanca. Desde este lado verás que la cámara gira mucho más despacio, tiempo de sobra para llegar corriendo y entrar. Cruza el puente y sal por la puerta del fondo para volver a la arena. Coloca la piedra y prepárate para el combate.

Derrota a Gnashor
Hemos colocado las tres piedras en la estatua y el campeón de la Arena aparece ante nosotros. La primera parte del combate es sencilla. Espera a que salga de la tierra y atrápalo con la garra. Acércate rápido y golpea con todas tus fuerzas. Cuando se levante, aléjate para evitar su ataque giratorio. El mayor problema que puedes encontrar es que el gusano no quiera salir, en ese caso se paciente. Espera a que vuelva a salir y repite la operación.

Ahora empieza el verdadero combate. Todo irá bien mientras consigas permanecer pegado a él, preferiblemente a su espalda. Tratará de aplastarte con su pisotón, pero tienes tiempo de sobra para saltar hacia atrás y volver a atacar.

Si te pones delante a una distancia media, sacará el látigo y empezará a sacudir el suelo (mucho ojo con esto porque puede fulminarte). Aunque es un ataque letal, mientras lo hace no puede darse la vuelta. Si consigues estar detrás en este momento tendrás una ocasión perfecta para encadenar varios golpes.

Continúa atacando hasta que te lance un grito, en ese momento verás que la cara se ilumina en azul. Atrápalo con la cara y volverá a ser un gusano. Aprovecha el momento para atacar con tus mejores golpes. Repite la operación hasta que consigas someterlo.

Devuelve el cráneo al Trono Eterno
Derrotado el campeón de la Arena, abre el mapa y utiliza el viaje rápido para regresar al Trono Eterno. Entrégale el cráneo de Gnashor al canciller y te dará una audiencia con el Rey de los Muertos. Preséntate ante él y recibirás tu próximo destino.

FARISEO

Encuentra la Sepultura del Fariseo
El Fariseo es el primer Señor Muerto que debemos resucitar, pues tal es la voluntad del Rey de los Muertos. Para encontrarlo viaja hasta las entrañas del Buche. Si no lo has explorado ya, puedes cabalgar desde su entrada norte, al sur de la Brecha.

Llegarás ante la puerta negra. Cruza el umbral y rompe el cristal que hay dentro para bajar el ascensor. La tumba está plagada de momias, no te costará derrotarlas a estas alturas. Sigue recto y llegarás a una sala con un interruptor. Ignóralo por ahora y trepa al muro de la derecha. Coge la bomba que hay arriba y rompe toda la corrupción de la zona.

Salta al suelo y trepa por la pared de la izquierda para recoger el cofre. Ahora utiliza la garra para coger la columna que está en la cornisa de la izquierda y ponla frente a los barrotes. Coge una bomba y sitúate sobre el interruptor de la entrada. Lanza la bomba a la columna y la explosión hará que se ponga bajo los barrotes, dejando la puerta abierta cuando te muevas.

Sigue recto y llegarás a un ascensor con cuatro interruptores. Antes de bajar, cruza hasta el final y abre el cofre que hay al fondo de la sala. Regresa al ascensor y fíjate en los números dibujados al pie de cada cristal. Cada uno lleva al piso indicado. Comenzamos por el 1.

Piso 1
Sube al ascensor y golpea el interruptor que lleva al primer piso. Verás que hay dos puertos, empieza por la que lleva a la sala norte en el mapa. Una vez allí, trepa a la pared de la izquierda y rodea la zona. Déjate caer en el piso y gira la palanca.

Los ganchos en mitad de la sala cambiarán. Cruza al otro lado y abre el cofre con el mapa (si te caes a la arena, trepa saltando por la pared de la derecha hasta arriba). Fíjate en la jaula que acaba de bajar y verás una bomba. Cógela y pégala a la palanca. Ahora trepa por la pared de la izquierda y regresa a la entrada. Dispara a la bomba y salta rápido por los ganchos antes de que suba el segundo.

Coge la llave y regresa por donde entraste. Arriba te espera un combate un duro contra unos espectros. Primero te enfrentarás a uno, agárralo constantemente con el toque espectral y no le darás tiempo a atacarte. Acaba con él y aparecerán otros dos, este ya es más difícil. Si tienes guardado el segador, utilízalo ahora y te evitarás muchos problemas.

Piso 3
Vuelve al ascensor con la llave esqueleto y sube al piso 3. Abre la puerta y prepárate para un duro combate. Dos segadores te esperan en una sala amplia. Enfréntate a ellos sin fijar objetivos, de esta manera tendrás más control sobre el campo de batalla.

Trata de separarlos con la garra y atácalos por separado. Presta atención a cuando carguen el ataque y esquiva saltando. Después tendrás un breve instante para atacar antes de volver a esquivar. Cuando derrotes al primero aparecerán otros dos, así que intenta dejar al segundo bastante dañado antes de matar al primero. Si tienes acumulado el segador, este es el momento de utilizarlo.

Cuando acabes con los espectros no te relajes, tendrás que enfrentarte al General de los No Muertos casi sin respirar. La buena noticia es que este enemigo es más lento y no te castigará tanto. La mala que es muy resistente y tardarás en someterlo. Aléjate de su barrido con escudo, cuando ataque queda expuesto a tus golpes. El resto del tiempo estará protegido tras el escudo y no podrás hacerle nada salvo que consigas cogerle la espalda.

Tras acabar con él, sigue por la puerta norte de la cámara y continúa hasta ver el ascensor. Justo a la izquierda hay una pared por la que puedes trepar. Sigue el circuito y sal por la puerta este. Coge una bomba y destruye la corrupción que bloquea el camino de la izquierda, dentro de la sala.

Sigue el circuito de las vigas y desciende. Corre por la pared de la izquierda para recoger el cofre y luego sigue saltando por las vigas. Trepa a la enredadera de la pared y activa la palanca. Baja y empuja la columna por el puente (puedes trepar a la pared de la derecha y conseguir el libro de los muertos). Coloca la columna en el centro de la sala circular y después regresa por el mismo camino por el que viniste, trepando de nuevo por las vigas de madera. Ahora ya puedes tomar el ascensor y bajar al segundo piso.

Vence al Fariseo

Piso 2
Tras conseguir llegar con el ascensor al segundo piso, cruza por la única puerta abierta y llegarás a la tumba del Fariseo. Pisa el interruptor para bajar los barrotes y afila tus armas. En la primera parte te enfrentarás sólo contra él, no te costará mucho. Golpéale fuerte y no le dejarás atacarte. Si salta aléjate para evitar su ataque de área y luego sigue atacando.

El combate se complica cuando los huesos se levantan a tu alrededor y te ves rodeado de esqueletos. Céntrate en el fariseo y mantén alejado a los esqueletos con ataques de área. Cuando lo derrotes, recibirás el poder de invocar a señores muertos. Sitúate sobre el sello del suelo y pulsa el botón.

Puedes dar órdenes a tu siervo para que se mueva a donde le digas. Acércate a la verja y ordena que se ponga sobre el interruptor al otro lado. Regresa al ascensor y prepárate para un largo paseo hasta el primer piso.

Piso 1 (Cámara del tesoro)
La salida del templo está en el primer piso, pero el camino está bloqueado en ascensor. Para llegar, sube al tercer piso y rodea toda la zona por la puerta sur. Saldrás de nuevo por la puerta oeste del ascensor. Sigue el circuito de la pared y sal por la puerta de enfrente. Déjate caer por las vigas de la izquierda y llegarás al primer piso.

Sal por la puerta sur y verás un sello invocador en el suelo. Llama a tu siervo y ordénale que se ponga sobre el interruptor al otro lado de la verja. Cruza el pasillo y llegarás ante la cámara del tesoro. Hay tres cofres y cada uno invoca a un enemigo más poderoso, así que lo mejor es seguir un orden.

Selecciona el poder de la veda e invoca al señor muerto en el sello de la esquina. Después ordénale colocarse sobre el interruptor del centro. Empieza abriendo el cofre de la izquierda que invoca a una horda de momias. Tu compañero hará de señuelo, así que no tendrás mucho problema en acabar con ellas.

Superado el primer combate, abre el cofre de la derecha y aparecerán varios espectros. Permanece escondido en la zona de los cofres y no te atacarán. Atráelas con la garra y acaba con ellas una por una. Después vendrá el verdadero desafío.

El último cofre invoca a dos generales muertos. Ordena a tu siervo que se mueva y ataque a los generales. Tú sólo debes preocuparte de esquivar y dejar que él se encargue del combate. Si cae, vuelve a invocarlo en el sello de la esquina (recuerda tener el poder de la veda seleccionado). Si los generales te persiguen, tu compañero podrá atacarlos por la espalda. Si le atacan a él, aprovecha el momento y ataca tú.

Tras sobrevivir a la cámara de los tesoros, utiliza el viaje rápido para salir del templo y dirígete hacia la espina a por el segundo Señor Muerto.

GRAN JUEZ

Encuentra la Sepultura del Gran Juez
El Gran Juez se encarga de juzgar las almas que entran en el Reino de los Muertos. Debe comparecer ante el Rey Muerto y nuestra misión es llevarlo hasta allí. Antes debemos llegar a la Sepultura, al final de La Espina. Tras conseguir el poder Veda en la Tumba del Fariseo, ve al sur del Buche y entra en la muralla.

Invoca un señor muerto y pídele que active la palanca de la izquierda. Ve por el pasillo de la derecha y recoge el cofre que hay al final del circuito. Déjate caer y cuando salgas, busca el trozo de pared que hay junto a la puerta y que te permite escalar. Recoge el cofre y prosigue tu camino hacia el sur de la espina para encontrar al Gran Juez.

Habla con el Gran Juez
Una vez dentro de la sepultura, selecciona la veda e invoca a un señor muerto en el sello de la derecha. Ordénale que accione la palanca que hay dentro de la jaula y después continúa por la puerta sur. Nada más entrar en la sala, ve hacia la derecha y tendrás una pelea dura. Invoca rápido a tu siervo en el sello, después ocúpate de los merodeadores y por último del campeón.

Activa la palanca y subirá un pilar en el centro. Déjate caer al suelo y mueve la columna en el centro de la sala, entre los dos pilares. Sube al primero y salta a la columna. Desde arriba, ordena a tu siervo que pise el interruptor que hay al otro lado y salta al segundo pilar, que se elevará permitiéndote llegar al otro lado. Coge el cofre de la izquierda y sigue por la puerta. Acércate al estrado y habla con el juez.

Encuentra la primera alma
El Gran Juez reclama el alma de tres espíritus. Comenzamos por la puerta oeste de la sala. Avanza y te encontrarás una nueva criatura, el Lich. Si le lanzas la garra tratará de aplastarte con su jarrón, esquiva y tendrás un momento para atacar mientras se recupera. Entre sus poderes está el de alzar a los muertos, ignora a los esqueletos y céntrate en el Lich.

Sigue recto hasta el final del pasillo e invoca al espíritu en el sello que hay junto a la puerta. Cruza y envía al siervo a pisar el interruptor al otro lado del abismo. Pasa el puente y repite la operación con el interruptor que hay al otro lado. Verás que sólo se eleva la mitad del puente, salta y agárrate al otro lado con la garra. Coge la bomba que hay en la zona y destruye la corrupción que bloquea las cadenas del puente.

Utiliza la garra para coger el farol que está a los pies de la estatua, y luego abre el cofre que hay a la derecha para obtener el mapa. Regresa por el puente, coloca el farol en la estatua del centro y rota para abrir la puerta del cofre. Vuelve a rotar la estatua y continúa por la última puerta. Trepa por la pared de la derecha y asciende por el circuito recogiendo el cofre que hay bajo la segunda argolla.

Arriba tienes la primera alma, pero conseguirla tiene un precio. Cuando la cojas te enfrentarás a otro lich y dos campeones esqueletos. Si tienes acumulado el segador, libéralo ahora y acaba rápido con los dos esqueletos. Después podrás enfrentarte relativamente fácil al Lich.

Cuando termine el combate, asómate al borde y busca el cofre que hay en el piso inferior. Déjate caer sobre él y podrás abrir el último tesoro de la zona. Baja al piso inferior y sal por la misma puerta por la que entraste. Si te fijas a la izquierda del puente verás un hueco por el que puedes saltar. Regresa al estrado y entrega la primera alma.

Encuentra la segunda alma
Tras entregarle la primera alma al Gran Juez, se abre la puerta que nos lleva hacia la segunda. Cruza el puente con las armas bien afiladas porque te espera una dura batalla por delante.

El combate empieza contra un grupo de merodeadores. Si te enfrentas a ellos sin fijar objetivos podrás controlar el terreno de batalla y ver si te rodean. Para llevar bien la batalla deberías superar esta primera parte sin consumir pociones. Cuando queden dos merodeadores aparecerán tres campeones esqueletos. Permanece alejado y utiliza la garra para atraerlos y golpear antes de volver a tomar distancia. Trata de acabar con ellos uno por uno.

Derrotados los tres campeones aparece en escena el Torturador. Impresiona, pero podrás acabar con él sin muchos problemas si consigues cogerle la espalda. Si te pones delante soltará una descarga de golpes, en este momento no se puede defender así que rodea y ataca. Por último intentará atacarte con su saliva tóxica, aléjate cuando empiece a escupir y no dejes de atacar por la espalda.

Cuando caiga, sigue por la única puerta abierta de la sala. Al final encontrarás un sello, invoca al señor muerto y pídele que pise el interruptor de la derecha que desbloquea un circuito. Corre por la pared y coge el cofre que hay a medio camino. Sigue hasta el final y agárrate a tu siervo para alcanzar el otro lado.

Sigue por el pasillo y corre por la pared de la izquierda, lanza la garra y trepa a lo alto. Nada más subir, mira la pared de la derecha y trepa para conseguir un cofre. Antes de volver, déjate caer al piso de abajo y recupera la reliquia. Vuelve al pasillo anterior y activa la palanca.

Sigue hasta el final del pasillo y antes de llegar a la puerta sufrirás una emboscada. Acaba con los esqueletos y pasa a la siguiente sala. Rodea la zona acabando con los enemigos. Abre el cofre de la izquierda que tiene la llave esqueleto y el que está al final de la terraza.

Vuelve al pasillo anterior y trepa por la pared que hay tras la palanca (donde estaba el cofre). Déjate caer por el agujero y vuelve a la sala donde estaba la puerta cerrada y utiliza la llave esqueleto. Al otro lado te encontrarás un circuito, así que ya sabes... a trepar. Tras pasar la segunda argolla, puedes saltar hacia la derecha y recuperar una página del libro de los muertos. Sigue trepando hasta lo más alto y verás la segunda alma condenada.

De nuevo tendrás que pelar después de recuperarla. Esta vez te enfrentas a dos campeones esqueletos y un acechador no muerto. Acaba primero con los campeones, si tienes acumulado el segador libéralo ahora. Destruidos los dos campeones, te resultará relativamente fácil derrotar al acechador si te mueves rápido.

Terminada la pelea, fíjate que hay un cofre señalado en el mapa. Asómate al borde justo encima del cofre y verás un trozo de escalera debajo donde está situado. Déjate caer y recógelo. Después tírate al suelo y regresa al estrado para presentar la segunda alma.

Encuentra la última alma
Hemos presentado al Gran Juez dos de las tres almas que reclama. Sólo queda un camino por el que seguir. Cruza el pasillo hasta encontrar un sello en el suelo. Asegúrate de invocar al señor muerto antes de continuar porque lo necesitarás para el combate que te espera en cuanto pises el ascensor.

Un general no muerto aparece nada más cruzar el umbral. Deja que se centre en tu compañero y acércate rápido a él utilizando la garra. Golpea por detrás y aléjate en cuanto levante el arma. Acaba con él y sube al segundo piso con el ascensor.

La corrupción bloquea el ascensor, así que tendrás que llegar a una bomba. Si te fijas en la zona verás que hay dos interruptores. Tras uno de ellos hay una pared por la que puedes escalar, coloca al siervo en el otro interruptor y sube por el primero.

Una vez arriba, sigue el circuito de la pared derecha hasta llegar a la terraza opuesta. Desde aquí envía al siervo a pisar el otro interruptor. Sigue trepando por el otro lado de la pared y llegarás por fin a la bomba. Pégala en la corrupción y subirá el ascensor. Cuando llegue arriba, cruza la puerta y bucea en el agua para conseguir una página del libro de los muertos. Sube las escaleras y trepa a lo alto utilizando la garra.

Recoge la última alma y desenvaina tus armas. Tendrás que derrotar al Guardián de los Huesos, colgado en el medio de la sala. Los muertos se alzarán a tu alrededor y tratarán de atraparte. Ignóralos y centra tus ataques en el guardián. Lanza la garra y ataca con tus mejores combos aéreos.

Cuando consigas destruirlo empezará el verdadero combate. Lo bueno es que no tendrás que ocuparte de los guerreros esqueletos, así que podrás centrarte bien en el guardián. Espera a que comience a descargar golpes y atácalo por detrás. Regresa por el camino de entrada y recoge la página del libro de los muertos que hay en lo alto de las escaleras.

Baja por el ascensor y regresa ante la audiencia del Gran Juez. Presenta la última alma y escucha la sentencia. Cuando estés listo, viaja de nuevo a la Arena Dorada.

BASILEO

Encuentra el Psicamerón
Basileo es el tercer Señor Muerto que debe compadecer en la corte del Rey Muerto. Dicen que es el más poderoso de los tres y para llegar hasta él debes encontrar el Psicamerón. Viaja a la Arena Dorada y antes de entrar en el templo, asegúrate de comprar provisiones y preparar bien el equipo para la dura batalla que te espera más adelante. Cuando estés preparado, entra en el templo y sigue hasta llegar a la Arena Dorada.

Sobrevive al Psicameron
En cuanto llegues a la puerta del Psicamerón, te darán la bienvenida dos acechadores muy peligrosos. El recinto no es demasiado grande, lo que no facilita nada el combate. Es importante que procures evitar siempre que puedas quedarte encerrado contra una pared.

El triple zarpazo y la embestida son ataques casi mortales. Esquívalos y procura atacar en el momento que bajen la guardia. Por si fuera poco, cuando acabes con ellos aparecerá un tercero rodeado de merodeadores. Si has acumulado energía de siega, este es tu momento.

Cruza la puerta e invoca a los dos fantasmas. A uno ordénale que se coloque sobre el interruptor de la derecha. Puedes subir por la pared que hay justo detrás para abrir el cofre. Colócate al final de la sala y manda al otro que vaya hacia el interruptor que quedó libre. La plataforma comenzará a subir y alcanzarás la puerta.

Invoca de nuevo a tus dos “amigos” y mándales que se coloque en los interruptores de la izquierda. Cuando estés al otro lado, puedes mandar a uno que active el interruptor que hay delante del cofre, y después utilizar la garra sobre el fantasma para cruzar al otro lado.

Desde aquí, echa un vistazo al barranco que tienes a tus pies. Verás que hay una puerta con un interruptor al otro lado. Da la orden de abrirla y después vuelve a engancharte al fantasma. Sigue el camino y cuélgate de la viga de madera para llegar al piso inferior.

Tras la puerta, te espera un acertijo de manivelas. Actívalas en el orden correcto y te evitarás problemas, ya que cada vez que falles aparecerá una nueva horda de enemigos. El orden correcto es: centro, derecha, izquierda. Si te equivocas tendrás que activarlas todas otra vez.

Vuelve sobre tus pasos hasta la puerta de la cerradura. Crúzala y usa la veda sobre el sello que hay a la izquierda. Primero coloca a un fantasma sobre el interruptor que hay junto al puente. Después manda al otro que vaya al que hay en el extremo izquierdo.

Se abrirá la puerta que está más al este, crúzala y observa la zona iluminada que hay un poco más abajo. Da la orden y recorre el circuito de plataformas, utilizando al fantasma para realizar el último movimiento y abrir los cofres. Sube y usa la palanca para abrir la puerta.

No salgas de túnel. Retrocede unos pasos, baja la escalera y toma el camino de la derecha hasta que veas el siguiente interruptor. Sigue hasta el puente y ordena que lo suban con la palanca que hay a la izquierda. Sigue el camino de las escaleras y estarás al otro lado.

Cruza la puerta y prepárate para los problemas. Convoca a los fantasmas y enfréntate a los esqueletos de élite. Tras esto, un campeón hará acto de presencia. Si esquivas uno de sus primeros golpes cerca del sello, puedes aprovechar para invocar de nuevo a tus ayudantes.

Tras derrotarlo otras dos criaturas. Recuerda que los escarabajos son inmunes a los ataques mientras se protegen con su cáscara. Si tienes energía de siega puedes usarla ahora, aunque tampoco será tan necesaria como en otras ocasiones. Cruza la puerta y en la nueva sala, corre por la pared hasta llegar a la palanca.

Acciónala para elevar los puentes y abrir la puerta. Sigue el camino hasta que llegue a una zona rocosa. Después de pasar el puente, puedes recoger otra reliquia más en la parte derecha, cerca del grupo de escarabajos. Al final del trayecto te enfrentarás contra el jefe de esta mazmorra: Basileo

La lucha contra este guerrero fantasmal es encarnizada, intenta llegar en las mejores condiciones. Sus primeros ataques consisten en remolinos y arremetidas desde el cielo. Lo mejor es que te mantengas a cierta distancia de él, en continuo movimiento y esquivando sus ataques.

En ese momento usa la garra para acercarte a él y golpear. Ten en cuenta que Basileo también se protege con un escudo, así que lo más sensato cuando se ponga a la defensiva es retirarse y esperar a que se descubra. Tras un tercio de vida aproximadamente, entrará en juego su mascota.

Achidna es una araña gigante sobre la que se montará en dos ocasiones a lo largo del combate. La primera vez es relativamente sencillo atacar. No le dejes demasiado espacio para que no te embista. Observa el área de efecto que tendrán sus rayos y apártate rápidamente hacia con un par de saltos hacia un lado. Ese es el mejor momento para atacar.

Cuando el fantasma esté de nuevo sobre el suelo, seguirá la lucha cuerpo a cuerpo, sólo que en esta ocasión tendrá un ataque nuevo: invocar a la araña. Ésta caerá desde el arriba y te causará mucho daño si te aplasta. Cuando se vuelva a montar será al revés.

Además de que los ataques de Achidna se vuelven mucho más violentos y peligrosos, Basileo bajará de vez en cuando y te atacará también. Céntrate en golpear a la araña y terminar con ella cuanto antes, y si tienes la oportunidad de convertirte en segador no lo dudes. Regresa al Trono Eterno y lleva los Señores Muertos con el Rey Muerto. Acércate a la puerta de la sala del trono y comenzará la escena.

LA CIUDAD DE LOS MUERTOS

Ve a la Ciudad de los Muertos
Como recompensa por servir al Rey de los Muertos, ahora dispones de una habilidad nueva: partealmas. Muerte es capaz de dividirse en 2 sombras que se mueven por separado. Por otra parte quedará una estatua en el lugar donde uses el partealmas, de manera que cuando desaparezcan las sombras, continuarás desde ese lugar.

Pues bien, este es el primer requisito para acceder a la Ciudad de los Muertos. Fíjate en las estatuas que hay antes del pasillo que conduce a la puerta principal. Cada una se puede mover hacia un lado, pero necesitas mantenerlas al mismo tiempo las dos. Utiliza tu nuevo poder y mueve ambas columnas hacia los extremos. Cruza la puerta y cumplirás este objetivo.

Explora la Ciudad de los Muertos
Cruza el pasillo y llegarás a la primera sala. Sólo hay unos escarabajos, acaba con ellos y recoge el cofre de la izquierda antes de continuar. En la siguiente habitación te espera tu primer combate. Dos campeones que vigilan la sala y luego vendrá un general.

No será demasiado difícil aunque es un buen calentamiento para empezar. Para abrir la puerta, primero debes situarte encima del interruptor que hay a su izquierda. Una vez arriba, utiliza el partealmas para dividirte y coloca a una de tus sombras sobre el otro botón.

Utiliza la tercera forma para trepar y activar la palanca. En la siguiente habitación encontrarás dos puertas cerradas. En el centro hay un gran agujero aunque eso lo dejaremos para más adelante. Sigue por el pasillo que hay al oeste, acaba con los huéspedes que te bloquean el paso y corre por la pared para sortear el último salto.

Recorre el único camino posible hasta llegar a una habitación con una palanca en el centro. Primero divídete, y usa una de las sombras para abrir la puerta girando la manivela. Cruza la puerta con el segundo espectro y recoge una de las bombas que hay a la izquierda.

Regresa y busca la segunda palanca, la que está en una pared inaccesible. Detona la bomba sobre ella y abrirás los pinchos que protegen el bloque flotante. Recupera tu forma normal y súbete encima. Vuelve a convertirte en sombras, y “empújate” hasta el otro lado.

Para abrir el cofre de esta habitación sólo tienes que colocarte sobre los dos interruptores, tal como hiciste al principio. Sube las escaleras de la derecha y encontrarás otro cofre arriba del todo. Regresa y baja el primer tramo de escalera. En lugar de volver hacia la misma dirección, toma el camino de la izquierda (puede que se confunda un poco con el entorno).

Déjate caer por el hueco que hay en el suelo y abrirás dos cofres, uno de ellos contiene la llave de la puerta. Usando la palanca de la pared llegarás directamente a la sala central. Abre la puerta y ve hasta el centro del puente. Crea dos réplicas en este lugar y manda a una que suba por la pared de la derecha que hay al final del puente, la que tiene una argolla.

El juego de plataformas continúa por el hueco de la pared, saltando de una a otra y subiendo hacia el piso superior. Gira la palanca y coloca el puente en vertical. Con tu segunda copia, cruza el puente y trepa por la pared de la izquierda. Utiliza la anilla para llegar al otro extremo y abrir el cofre.

Regresa de nuevo al piso inferior y cruza la puerta. Por una pequeña galería de la izquierda llegarás hasta la manivela. Gírala y ahora ya podrás recoger el farol en la sala central. Cuando lo tengas en tu poder, ve por el pasillo que va al oeste de esta habitación (el camino que tomaste la primera vez).

Deposita el farol en el suelo antes de saltar, y una vez al otro lado usa la garra para recogerlo de nuevo. Colócalo en la estatua y dirige el rayo hacia la puerta de la izquierda para conseguir una página del Libro de los Muertos. Después apunta hacia el centro y elevarás el puente.

Atraviesa la puerta que hay al otro lado y trepa por la pared de la derecha. Sigue el circuito de plataformas y abre el cofre que está junto a la puerta. En la siguiente sala hay dos espectros, recuerda utilizar la garra cuando carguen su ataque para dejarlos indefensos.

Después de despejar el camino, utiliza el partealmas en el centro del puente. Manda a la primera copia que mueva la palanca que hay a la derecha para girar el puente. El hueco que hay en él, te permite engancharte a tu propia estatua utilizando la garra.

Ahora súbete sobre la palanca dorada y cambia de cuerpo otra vez para seguir avanzando. En el siguiente pasillo hay dos espectros protegiendo un cofre, no te confíes. Justo antes de entrar a esta zona, da media vuelta y encontrarás una pared para trepar. Sigue el recorrido y podrás coger el ticket y la reliquia que había al principio.

Ahora que tienes todos los tesoros, recoge una bomba en la pared que hay cerca de la palanca dorada. Colócala sobre la manivela que hay en la parte superior izquierda de la habitación. Continúa por la puerta que acabas de abrir y supera este pasillo corriendo por la pared. Tendrás que saltar de una pared a otra para mantener la inercia de tu carrera.

Gira la palanca y cruza la puerta que tienes a la izquierda. Una vez en el segundo piso de la sala principal, dirígete al extremo este donde encontrarás una nueva puerta. Al otro lado, la manivela que desbloquea el camino. Salta al piso inferior y cruza la puerta que acabas de abrir.

Si echabas de menos los combates, este es tu momento. Primero tendrás que pelearte contra un grupo de espectros. Si no te quieres exponer lo más mínimo, puedes utilizar el segador para acabar con ellos rápidamente. A continuación, un general no muerto entrará en acción.

Con este enemigo es una cuestión de paciencia más que otra cosa. Espera a que intente golpearte y contraataca hasta que se cubra con el escudo. Cuando lo hayas vencido, empezará el verdadero reto. Primero te enfrentarás a uno de los gigantescos monstruos que hay en la zona.

Cuando lo hayas vencido, lucharás contra los dos que están a ambos lados. Si has guardado el segador, utilizarlo ahora casi te asegura la victoria. No obstante, los monstruos pese a lo violentos que parecen, son lentos y dejan la espalda muy vulnerable.

Cuando los hayas derrotado avanza hasta llegar a la palanca dorada que hay en la pared. Sube para activarla y entonces el suelo comenzará a subir. Es un circuito de plataformas rápido y complejo, aunque tras varios intentos podrás ver el camino con claridad.

Una vez arriba, usa la palanca para abrir la puerta. Corre por la pared de la izquierda y llegarás hasta el cofre que contiene el mapa. Regresa y avanza, aunque a los pocos metros sufrirás una emboscada. Este es el primer combate de una serie que te espera mientras subas las escaleras.

Todo se considera dentro del mismo punto, por lo que si mueres empezarás siempre desde el primero (no hay posibilidad de guardar). En total son tres combates, cada uno más duro que el anterior, así que lo mejor es que guardes tantas pociones y energía como sea posible para el final.

Comenzarás luchando contra un grupo de tres enemigos. Si acabas primero con los merodeadores, podrás quedarte a solas con el acechador, el que sin duda es el contrincante más peligroso de los tres. En el siguiente te tramo serán dos abominaciones las que te corten el paso. Estas criaturas, son realmente peligrosas cuando están rodeadas de un humo verde.

Esta nube tóxica te bajará vida con rapidez, y si al mismo tiempo estás siendo golpeado apenas durarás unos segundos. Aléjate de ellos cuando escupan líquido verde y procura rodearlos en este momento. Mantener a los dos juntos te dará una ligera ventaja ya que controlarás mejor sus ataques. Por último, hay momentos en que las abominaciones quedarán vulnerables. Te darás cuenta porque su color cambiará por completo. Este es el mejor momento para hacerles daño.

La siguiente pelea es frente a tres Licht. Recuerda que al atraerlos hacia a ti te golpean con su jarrón, apártate y golpea. La zona se llenará rápidamente de esqueletos debido a la magia del Licht. Puedes utilizar el segador si tienes a dos acorralados. Prácticamente los matarás y tendrás la batalla de cara contra el último.

Cuando consigas superar este duro tramo de escaleras, abre la puerta y déjate caer al suelo para abrir el cofre. Trepa por la pared hasta la posición inicial y haz el circuito de plataformas para alcanzar el otro extremo. Bien, has llegado hasta la segunda sala principal de la Ciudad de los Muertos.

Segunda Parte
En la sala del rayo, sal por la puerta del Oeste y sigue el camino hasta que llegues a un callejón sin salida. Busca la anilla en la pared y sube para superar otra zona de plataformas. Ahora colócate sobre el botón y crea dos réplicas. Mándala a través de la pared que acaba de quedar al descubierto, y gira la manivela para abrir la puerta. Puedes ir con el otro y abrir el cofre que hay a la derecha.

Ahora estás en la parte alta de la sala del rayo. Apunta hacia la argolla que hay en el techo y alcanza el mecanismo. Gíralo apuntando hacia la puerta oeste. Crúzala y tendrás dos batallas. La primera contra un gran escarabajo y muchos pequeños que le siguen.

Utiliza la pistola para eliminar rápidamente a los insectos pequeños. Después disputa la lucha contra el grande. De momento no es excesivamente complicado, pero luego tendrás que luchar contra dos al mismo tiempo. Recuerda, aléjate cuando salten sobre ti y no dejes de golpear en ese momento.

Tras el combate recoge una bomba y colócala sobre la corrupción de la pared. Trepa hasta el siguiente piso y ve a la derecha. Cruza las anillas de la izquierda para abrir otro cofre y después sal al exterior. Coge la llave del cofre y ni te acerques al dragón que patrulla por la zona, o caerás fulminado al instante.

Regresa hasta la sala del rayo y vuelve a la plataforma por la argolla de tu derecha. La puerta con la cerradura está al otro lado. Déjate caer al suelo y llega hasta ella por la pared que hay justo debajo (la parte derecha te permite escalar). Sigue el circuito y llegarás a un bloque flotante encerrado.

Baja un poco más y te encontrarás dos botones. Divídete cuando estés encima de uno y coloca una copia sobre el otro. Sube y saca la plataforma flotante de la sala. Recupera tu forma normal y súbete a ella para convertirte en piedra de nuevo. Utiliza una copia para accionar el interruptor de la izquierda (abre la primera puerta).

Pasa con la estatua a la sala del centro, y ahora retírate del primer interruptor y colócate sobre el segundo. Desliza de nuevo la plataforma y vuelve a tu estado normal. Pon la plataforma sobre el interruptor que hay a la izquierda y podrás abrir la puerta.

Al otro lado verás una manivela y suministro de bombas a tu derecha. Después de bajar los barrotes, cruza a la plataforma del rayo utilizando la anilla que tienes justo encima. Si el rayo apunta hacia ti, es posible que no la veas, pero comprobarás que está ahí si utilizas la puntería manual.

Tienes que hacer que el haz de luz quede completamente opuesto a esta zona. Si te fijas en el mecanismo que mueve el rayo, hay corrupción que la bloquea. Tu objetivo: lanzar una bomba desde la plataforma que acabas de acceder y destruir la corrupción. Ahora ya puedes utilizar el ascensor.

Te bajará directamente frente a la puerta bloqueada del principio. El rayo la mantiene abierta así que crúzala. Pasa el siguiente pasillo y prepárate para una gran batalla.

El Huésped Plañidero
En cuanto entres en la sala verás a tu enemigo surgir del agujero del centro, tendrás que luchar contra su mitad superior. La mejor forma de derrotarlo es pegarse al agujero por donde sale y atacar directamente a la cabeza. Tratará de aplastarte con sus brazos o barrerte con la mano derecha. Cuando vaya a golpear, salta para esquivar y sigue atacando.

Hacia la cuarta parte del combate, empezará a invocar esqueletos. Centra tus ataques en el jefe e ignora a los esqueletos siempre que puedas. Concentra tus ataques y derrota al Huésped Plañidero.

Vuelve al Árbol de la Muerte
Cuando termine el combate, cruza la puerta norte y habla con el Padre. Te mostrará tu siguiente destino. Viaja al Árbol de la muerte y toma el portal que hay a la derecha subiendo las escaleras. Al otro lado te espera Luzperdida y tu siguiente misión.

LA LLAVE DE LA REDENCIÓN

Después de hablar con el Padre Cuervo, tienes que realizar el viaje desde Luzperdida hasta la entrada de la Torre de Cristal, donde se encuentra tu siguiente objetivo. Por el camino hay varios cofres para abrir, todos accesibles y sin necesidad de romperte la cabeza para encontrarlos.

Además, una pequeña desviación del camino principal te conducirá directamente hasta la nueva ubicación de Vulgrim. Antes de llegar a la puerta de la Torre de Cristal, tendrás una pelea contra varios ángeles corruptos. El primer grupo será bastante asequible. Esquivar sus estocadas y contraatacar por la espalda es la mejor manera de bajarles vida rápidamente.

No dejes de moverte porque pueden llegar a rodearte si te confías. La lucha se complicará a continuación, así que sería una buena idea gastar pocos recursos en este primer enfrentamiento. Cuando hayas derrotado a unos cuantos, el ángel Nathaniel acudirá en tu ayuda. Resiste unos minutos más y completarás el objetivo.

Habla con él si deseas comerciar. También puedes conseguir una búsqueda secundaria en una de las opciones de diálogo (en color azul). Ve por el camino que hay a la derecha y llegarás hasta una palanca. Tira de ella para subir el elevador y sal por la única puerta que encontrarás abierta.

Si vas hacia la derecha verás un cofre. Una vez abierto, da media vuelta y sigue en la otra dirección. Utiliza tu poder para dividirte y llega hasta las bombas que hay al otro lado del abismo. Cuando la tengas en tu poder, pásasela a la otra forma y luego corre hasta la corrupción que hay al otro extremo.

Destrúyela y dejarás al descubierto la manera de escalar la torre. Recorre las escaleras hasta el final y verás la secuencia que da por finalizada la misión.

LA VARA DE ARAFEL

Primera parte
Nada más llegar a la Tierra tendrás tu primera batalla. Como ves, todo está asolado por la corrupción y las criaturas de la superficie se han vuelto del todo hostiles. Ayuda a los ángeles a contener las hordas de enemigos durante varios minutos y después tendrás una pequeña charla con Uriel.

Te enseñará cómo usar tu nuevo artilugio. Una ballesta que tiene dos tipos de ataque: disparos rápidos o uno más potente y más lento de recargar. También recibirás tu siguiente encargo: recuperar las tres partes de la vara de Arafel. Recoge la ballesta y ve por la calle que hay a la izquierda.

Si usas el arma tendrás mayor poder destructivo, aunque también limitarás considerablemente tu capacidad de movimiento. No obstante, recomendamos que sigas con ella y la sueltes rápidamente cuando necesites esquivar. Antes de llegar al final de la calle, continúa por el agujero que hay en el edificio de la izquierda.

Atraviésalo y ve a la derecha. En todo momento irán apareciendo infectados, así que ponte en plan “shooter” y domina la situación. Los enemigos de lava explotan cuando se acercan a ti, si esto sucede suelta la ballesta y salta a un lado. Las bestias tampoco son excesivamente difíciles de eliminar.

Dispárales el mayor número de proyectiles mientras estén a distancia. Llegarás hasta una cueva. Abre el cofre que hay a la izquierda de la entrada y luego accede hasta bajar unas escaleras. El recorrido no tiene pérdida y no encontrarás ningún enemigo nuevo digno de mención. Cuando encuentres el fragmento de la vara, dispara al campo de fuerza que lo rodea y sube por las escaleras para regresar a la superficie.

Segunda parte
Habla con Uriel y toma el camino hacia el siguiente fragmento de la vara. Avanza por las galerías subterráneas hasta que llegues a la salida, y recoge la nueva arma que hay en el suelo. Es un lanzaminas, muy útil contra los enemigos más grandes.

Sigue avanzando por las calles hasta que veas de nuevo la corrupción roja. Está en torno a la puerta de un edificio que hay a la izquierda. Continúa por ahí y llegarás al otro lado de la calle. Sigue el camino hasta que te encuentras con una nueva criatura: El Noos.

Esta criatura impresiona más a la vista que durante la pelea. Lo principal es mantener la distancia. Al tener una ballesta o un lanzaminas, puedes hacer ataques potentes desde lejos sin exponerte demasiado. Los bichos voladores que invocan pueden ser un auténtico incordio.

No obstante, debes centrarte en atacar al Noos y acabar con él rápidamente. Recuerda que mientras manejas un arma te moverás más despacio. Aunque tampoco es un enemigo rápido, controla la distancia para que no te sorprenda. Ahora sigue por el camino del fondo, destrozando enemigos y disparando a todo cuanto se mueva. Al final encontrarás el segundo fragmento y regresarás de nuevo con Uriel y los suyos.

Tercera parte
Ve por el camino que hay tras Uriel. Continúa por las galerías y toma el primer camino a la izquierda. Los combates serán constantes, por lo que no bajes la guardia en ningún momento. Después de superar el primer pasillo, llegarás a unas escaleras.

Súbelas, y volverás a encontrarte de nuevo con El Noos. Realiza las mismas tácticas que en el enfrentamiento anterior, aunque ten en cuenta que esta vez, la calle es más estrecha. Después de vencerle, sigue por el puente de la derecha hasta el final.

Date media vuelta y sube por el trozo de puente caído que tienes delante. De nuevo, tendrás que pelearte con un Noos. Continúa por el puente hasta que veas la corrupción roja a tu izquierda. Al fondo verás el último fragmento de la vara de Arafel. Sigue por el pasillo que hay tras él, y te reunirás con los ángeles.

TINTES DE HEREJÍA

Llega la Ciudadela
Tras encontrar las tres partes de de la Vara de Arafel, el camino a la Ciudadela está despejado. Sólo tiene que subir a lomos del grifo y disfrutar del paseo hasta la Torre.

Busca al Escriba

Andador de vacío
Después de aterrizar en la torre, cruza la primera puerta. Evita pisar el charco de corrupción que hay en el suelo y trepa por el muro de la izquierda. Cuando llegues arriba verás una palanca, gírala para que baje el ascensor y limpiará la corrupción de la sala inferior. Baja y cruza la puerta.

Cruza el puente eliminando a los espíritus vengativos y utiliza la garra para sortear el abismo que lleva a la siguiente puerta. Un segundo pasillo te lleva a una sala circular con dos puertas abiertas. Comienza por la derecha y sigue hasta llegar a una sala abierta. Sube las escaleras de la derecha y después de coger el cofre, entra por la gruta que hay en lo alto de las escaleras. Trepa por el muro del final y saldrás de nuevo al exterior.

Acaba con la pareja de ángeles corruptos y ve hacia la derecha. Déjate caer por el borde y caerás en una cornisa con un cofre que contiene el mapa de la mazmorra. Corre por la pared que hace esquina hasta el saliente, sigue corriendo saltando de pared en pared y llegarás a una terraza con un interruptor circular en el suelo, y un sello dorado más grande justo al lado.

Ponte encima del sello dorado y utiliza el partealmas dejando la estatua en el centro. Coge una de tus copias y ponla sobre el interruptor. Pasa bajo el conducto que se acaba de abrir y trepa a la cornisa de la izquierda. Verás un segundo interruptor, ponte encima y la estatua caerá por el sello.

Vuelve a tu forma habitual y trepa por el otro lado del túnel. Salta por la cornisa y derrota a los ángeles corruptos. Coge la bomba que hay en la zona y destruye la corrupción del borde del puente. Salta utilizando la garra y entra en la sala. Ataca para liberar el poder y recibirás el “Andador de vacío.

Canal de agua 1
Con tu nuevo poder, abre un portal en el sello de la pared y otro en el que está en el piso superior. Sal al exterior y cruza saltando con la garra. Si te fijas en la zona hay un cofre aún sin abrir. Abre un portal en el sello de la izquierda y otro en el sello que está sobre el cofre. Coge la bomba y pégasela a la corrupción a través del portal. Salta para abrir el cofre y después regresa saltando por las paredes otra vez.

Vuelve junto al portal y esta vez abre el de la derecha, de forma que utilizando el que tienes al lado llegues al otro lado del precipicio. Dobla la esquina y verás una compuerta en el suelo junto a una palanca. Actívala y déjate caer por el agujero. Una vez abajo, carga el agujero de vacío y abre dos portales, uno en el pasillo de la izquierda y otro en el suelo del fondo. Entra por el de la izquierda para salir al exterior.

Avanza y te encontrarás un nuevo enemigo: el ayfid. Debes tener cuidado cuando veas un destello brillante, pues es su momento de ataque. La garra es inútil contra él, así que esquiva y ataca. Tras derrotar al primero aparecen otros dos, así que administra tus recursos.

Sigue hasta el borde y abre un portal en el sello que tienes a la derecha y otro en frente, entre los dos ángeles corruptos. Acaba con ellos y gira a la derecha, donde verás un puente que lleva a otros dos ángeles corruptos. Derrótalo y verás un camino bloqueado por corrupción oscura.

Si observas a la derecha verás un portal al otro lado del abismo, junto a uno de los orbes de luz. Abre un portal y otro justo detrás de ti, tras el orbe que tienes al lado. Ambos se conectarán limpiando la corrupción oscura. Cruza el puente y sube por las escaleras de la derecha.

A medio camino verás un hueco que lleva a una sala con dos portales. Carga el agujero y abre uno en el suelo y otro en la pared (recuerda cargar el poder). Vuelve al exterior y cruza la puerta que hay en lo alto de las escaleras. Al otro lado te espera un combate duro, primero contra dos ayfids y después varios ángeles corruptos que se unen a la fiesta. Intenta debilitar a los ayfis por igual o utiliza el segador si las cosas se complican.

Cuando termine el combate, ponte en el centro de la sala y utiliza el partealmas. Coge cada una de tus copias y activas las palancas que hay a ambos lados de la sala. Si todo está correcto, el agujero del centro se abrirá, la estatua caerá por el portal del suelo y saldrá despedida por el de la pared llegando al otro lado de los barrotes.

Trepa por el circuito de la pared y una vez arriba verás un orbe. Abre un portal y luego abre el segundo junto al orbe que hay en el suelo. Esto restablecerá el flujo de agua de la torre.

Canal de agua 2
Tras reactivar el agua en el templo, sigue el circuito por el canal y llegarás ante una corrupción junto a una bomba. Trepa por la enredadera de la pared y cruza la puerta que hay arriba. Sigue hasta el final del pasillo y saldrás de nuevo al exterior. Baja por la izquierda y tendrás un combate.

Derrota primero al campeón corrupto y luego acaba con otro apoyado por dos ayfids. Acaba con todos y sigue por el puente hasta llegar a una sala circular. Desciende por el hueco y llegarás a otra sala con un orbe. Ignóralo por ahora y sal a la terraza. Derrota a los ángeles corruptos y verás un circuito.

Corre saltando por la pared hasta llegar arriba. Una vez allí, lo primero es mover la palanca que hay al fondo junto al sello en la pared. Después utiliza el partealmas y gira la primera palanca. Bajará la primera pared y podrás ver el sello que hay detrás. Cambia de cuerpo y abre un portal en el sello de la pared y después en el que acabas de descubrir. Cambia de cuerpo y gira la segunda palanca. Ahora sólo tienes que volver a cambiar de cuerpo y entrar por el portal para llegar al otro lado. Mueve la palanca y se abrirá la puerta, recupera tu forma original y pasa bajo ella.

Cruza corriendo por la pared y al llegar al otro lado encontrarás un cofre con la llave esqueleto. Sube por la pared de la derecha, coge la bomba y despeja el camino que te lleva a la puerta. Trepa a lo alto de las escaleras y utiliza la llave. Dentro encontrarás un orbe y un portal.

Si has seguido las instrucciones anteriores, deberías abrir un portal y aparecer justo en la zona anterior de las palancas. Entra por la puerta que comunica con el piso de abajo y abre un portal junto al orbe. El rayo conectará con el orbe superior y el agua empezará a fluir. Sigue el curso del agua hacia la derecha y continúa hasta entrar por la puerta central.

Canal central
Sigue todo recto hasta encontrar dos portales junto a dos argollas. Abre un portal en cada sello y salta utilizando la garra para meterte en el portal. Una vez abajo, mira por encima de tu cabeza y verás otro sello. Abre un portal cargado arriba y entra por el que acabas de salir, corre por la pared y completa el circuito para llegar a lo alto.

Sigue el camino y te encontrarás un nuevo enemigo: el psicofante. Utiliza la garra para acabar con ellos y después avanza hasta encontrar un orbe y poco más adelante, una palanca. Utiliza el partealmas y gira la palanca. Cambia de cuerpo y saca el pilar de la zona central.

Vuelve a tu forma normal y ponte encima. Vuelve a utilizar el partealmas y deja la estatua sobre el pilar. Gira la palanca con uno de tus cuerpos y con el otro empuja el pilar al interior. Recupera tu forma y sal por la única salida, donde verás una palanca.

Utiliza el partealmas y gira la palanca con una mitad. La pared rotará y te mostrará otro sello. Abre un portal en la pared rotatoria y otra en el sello que hay en la cornisa inferior. Vuelve a tu forma original y suelta la palanca. Baja a la cornisa inferior pero no entres en el portal, en lugar de eso apunta a través del portal y abre otro en el sello que se ve al otro lado.

Vuelve a utilizar el partealmas y gira la palanca con una mitad. Con la otra regresa por el precipicio a la zona anterior (donde está la primera palanca que te permitía llegar al pedestal). Desde aquí lanza un portal al sello que hay abajo, junto al orbe que está cargado de luz. Si lo has hecho bien, el rayo pasará a través del portal cargando el orbe que está junto a la segundo palanca. Suelta la palanca y el rayo conectará automáticamente con el tercer orbe (el que está junto al pedestal).

Con el orbe cargado, sigue recto y entra por el camino de la izquierda a la sala central. Verás un orbe apagado en el centro, bajo un sello. Abre un portal y otro junto al orbe cargado, de esta forma volverá a fluir el agua. Sigue el canal y verás un sello al final. Abre un portal y regresa junto al orbe para cruzar a través del portal de la pared. Una vez al otro lado, apunta por el agujero para abrir un portal y pasa al otro lado utilizando el sello que tienes al lado. Déjate caer por el agujero y sigue el túnel hasta encontrar una puerta que puedes abrir accionando la palanca que hay justo al lado.

Una vez en la sala central, cruza la puerta doble y verás un sello al final y otro un poco más arriba. Debes crear un portal cargado en la parte superior para que te impulse al piso de arriba. Repite la operación de nuevo y una tercera vez para alcanzar el cofre de la izquierda. Cuando quieras continuar, corre por la pared y podrás alcanzar la puerta. Ahora sólo tienes que subir las largas escaleras y encontrarás al Escriba.

Derrota al Escriba
El escriba es un jefe tan vago como peligroso. Apenas se levanta de su trono, pero si intentas golpearle de cerca acabará contigo en un momento. La técnica para derrotarlo pasa por los portales que hay alrededor de la sala. Comienza abriendo uno a su espalda y otro en tu espalda. Espera a que forme la bola de energía y esquiva en el último momento. El ataque se volverá contra él, quedando aturdido a merced de tus golpes. Aprovecha el momento y ataca con todas tus fuerzas.

Todos los ataques que crucen el portal la hacen daño, pero el importante es la bola de energía. En ocasiones, el Escriba se elevará por los aires y caerá con una violenta sacudida. Si quieres esquivarlo, crea un portal en uno de los sellos superiores y entra cuando vaya a caer.

Llegado a la mitad del combate invocará dos ángeles corruptos. Date prisa en acabar con ellos, puedes utilizar los mismos ataques del Escriba para dañarlos. Cuando esté a punto de morir, verás que se pone flotando en el medio de la sala y proyecta un rayo. En el suelo hay un sello, abre un portal y otro en uno de los sellos del piso superior. Ahora sólo tienes que esperar a que el rayo pase por el portal del suelo y será tuyo.

LORD OF THE BLACK STONE

Entra en la piedra oscura y ve por la puerta que hay al final. Abre un portal con tu nuevo poder en el círculo verde de la izquierda. Entra por él y en seguida comprobarás que todo tu entorno ha cambiado. Lo primero que tendrás que hacer es enfrentarte a un grupo de demonios.

Es una pelea de resistencia, es decir, que tendrás que aguantar las hordas de enemigos hasta que dejen de salir. Sube las escaleras que hay al final y ve por el camino de la derecha. Coge el cofre que está al fondo del pasillo y luego regresa para bajar las escaleras.

Cuando llegues al precipicio, corre por la pared de la derecha y sigue el circuito de plataformas hasta el otro extremo. Avanza por el pasillo hasta el final, deshaciéndote de tus enemigos hasta que llegues a una pequeña zona circular. Usa tu garra para agarrarte a la argolla y comienza a ascender.

Cruza la puerta y activa la palanca que verás al otro lado. Después de acabar con el enemigo, abre un portal sobre el círculo verde que tienes a tu lado. Crúzalo y podrás recoger un ticket y abrir un cofre. Déjate caer abajo y escala la pared que tiene varios salientes.

Toma el camino de la izquierda y baja las escaleras hasta una nueva sala. Olvídate del portal por el momento y sigue todo recto hasta una zona de lava. En el centro verás corrupción negra que de momento no puedes destruir. Baja las escaleras de la izquierda y encontrarás una zona para crear portales azules.

Justo encima, está el otro por el que tendrás que salir (recuerda que deben estar ambos abiertos). Usa la garra para no pisar la lava y poder subir. Ve hacia la derecha utilizando los salientes de la pared, abre el core y continua el camino. Abre el portal en el círculo verde de la derecha.

Tendrás que enfrentarte con un nuevo enemigo. Esta especie de Litch de fuego, es muy peligroso cuando consigue cargar su ataque especial. La mejor manera de luchar contra él es utilizar la garra. Si consigues atraparle cancelarás su ataque y te dará la ventaja que necesitas para acabar con él.

Busca el interruptor que hay en el suelo, a un lado de la plataforma circular que está en el centro. Utiliza el partealmas para dividirte y crea un portal en la pared que hay sobre la lava. Utiliza la segunda sombra para bajar las escaleras. Ve por el camino de la derecha, utilizando la pared y las plataformas para evitar el precipicio.

En la siguiente habitación te esperan varios enemigos. Cuando acabes con ellos, abre el segundo portal y recoge una bomba. Lánzatela a ti mismo a través de la “puerta” que acabas de abrir. Una vez que estés con la bomba en la sala principal, apunta a la corrupción que hay en la plataforma del centro.

Abre un portal del tiempo en la pared y crúzalo para llegar hasta el cofre que contiene la llave. Vuelve y ve por las escaleras que hay a la izquierda del portal. Abre otra brecha temporal y sigue el camino hasta que llegues a la habitación con la puerta cerrada.

Deshazte de todos los enemigos antes de continuar. Recorre el pasillo y al final encontrarás una palanca que desbloquea el camino de la derecha. Utiliza la pared de la izquierda para alcanzar la parte baja de la habitación. Abre el cofre y crea un portal sobre la zona indicada (justo en el otro extremo).

Ve hacia la izquierda y abre un portal para teletransportarte. Da media vuelta y verás una pared que puedes escalar. Arriba del todo encontrarás la puerta que te lleva hasta el jefe de la mazmorra. Recorre el puente y sube las escaleras. Abre un portal para regresar al pasado y comenzará la lucha final.

Samael
La pelea contra este demonio no será nada fácil. Comenzarás teniendo un enfrentamiento directo, en el que tu rival es más fuerte pero tú eres más rápido. Esquiva y ataca, esquiva y ataca. Siempre vigilando tu espalda para que Samael no te sorprenda cuando desaparece.

Su segundo ataque lo realiza desde lejos, retirándose al otro lado de la lava y formando varias esferas de fuego que luego proyecta hacia ti. No son difíciles de esquivar, salta hacia los lados momentos antes del impacto. Cuando el demonio se quede en “letargo”, se creará un puente en el medio que te permite llegar hasta él y golpearle.

Durante esta segunda fase del combate, tu principal problema será esquivar los ataques que realiza por el suelo. Verás unas marcas doradas que señalan el lugar donde va a surgir la lava. Si Samael rodea todo el suelo de círculos amarillos, observa bien hacia dónde vas a dar tu siguiente paso.

La otra variante es un rastro de fuego que intenta crear justo en la posición que te encuentras. Para esquivarlo, debes saltar hacia los lados no más de 2 veces. Si haces 3 movimientos evasivos seguidos, tras el tercero quedarás unos segundos parado, lo suficiente para sufrir en tus carnes el poder de Samael. Después de vencerlo recibirás la llave demoníaca. Contempla la secuencia y finalmente abrirás la puerta de las almas.

AVATAR DEL CAOS

Ya estás ante la última lucha de Darksiders II. El Avatar del Caos es un enemigo fuerte, pero no tiene ningún secreto para vencerle. Usa tus técnicas habituales para pelear contra él lo mejor que puedas. Tu enemigo tiene golpes muy poderosos, pero podrás esquivarlo con relativa facilidad.

Tendrás dos momentos durante el combate en los que el Avatar parecerá derrotado pero conseguirá hacerte frente una vez más. Después de la segunda vez, es un buen momento para utilizar tu poder de segador e intentar bajarle el último cuarto de vida lo más rápido posible. No es una pelea excesivamente dura, y estás a un paso de conocer el final desenlace de Muerte. No te agobies si mueres un par de veces, ¡ya está prácticamente hecho!